Toda la vida los científicos suelen informar sobre nuevos avances o descubrimientos en su campo, no solo para informar sino también con el fin de obtener más financiación. En esta línea, el ‘Istituto Italiano di Tecnologia’, ubicado en Génova (Italia), ha desarrollado una innovadora batería recargable comestible que busca aumentar las aplicaciones del uso de una batería, veamos más sobre esto.
Lo que debes saber sobre estas nuevas baterías comestibles
Lo interesante de esta batería es que es biodegradable y también es segura para los seres humanos al tratarse de un producto comestible. Esta batería funciona a 0,65 V, lo que la hace segura de usar, y es capaz de proporcionar unos pocos microamperios durante más de una hora, lo que es suficiente para suministrar energía a pequeños dispositivos electrónicos durante un tiempo limitado. El coautor del estudio, Ivan Ilich, explicó lo siguiente:
«Esta batería comestible también es muy interesante para la comunidad de almacenamiento de energía. Construir baterías más seguras, sin el uso de materiales tóxicos, es un desafío al que nos enfrentamos a medida que aumenta la demanda de baterías. Si bien nuestras baterías comestibles no alimentarán vehículos eléctricos, son una prueba de que las baterías se pueden fabricar con materiales más seguros que las baterías de iones de litio actuales. Creemos que inspirarán a otros científicos a construir baterías más seguras para un futuro verdaderamente sostenible».
La meta es lograr productos sostenibles. La batería está compuesta de riboflavina (vitamina B2) como ánodo y quercetina como cátodo. Para aumentar la conductividad eléctrica, se utilizó carbón activado y el electrolito es a base de agua. El separador, es necesario para evitar cortocircuitos y se hizo con alga nori.
Los electrodos, se encapsularon en cera de abeja con dos contactos de oro de calidad alimentaria. Los investigadores dicen que esta prueba de concepto, abrirá las puertas a nuevas aplicaciones electrónicas comestibles. Esto, permitirá diagnósticos médicos, tratamientos y formas más seguras para monitorear la calidad de los alimentos.
En un futuro estas baterías se podrán aplicar en el sector salud y el alimentario. Las baterías comestibles pueden proporcionar una fuente de energía limpia y segura para un dispositivo electrónico, al tiempo que es biodegradable y segura en caso de ser ingeridas.
Se están desarrollando una variedad de nuevas tecnologías de baterías para mejorar la autonomía, el rendimiento y la seguridad de las baterías de los diferentes dispositivos eléctricos. Además, se están explorando otras tecnologías de baterías, como las baterías de estado sólido y las baterías de grafeno, que podrían proporcionar una mayor eficiencia energética y una mayor seguridad.
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