La americana Ford sigue disfrutando de las mieles del éxito con su muscle car, el Ford Mustang. Su actual generación es la más global de cuantas se hayan fabricado, y ahora aumenta aún más su atractivo con la llegada del Ford Mustang High Performance Package, una nueva versión destinada a los usuarios más cañeros que no pueden -o quieren- contar con un V8 bajo el capó.
El Ford Mustang es toda una institución dentro del mundo del motor. Su historia no ha hecho más que engordar con el paso del tiempo, y la marca americana ha decidido desarrollar una nueva versión, con un toque mucho más cañero y dinámico, combinada con la ligereza del motor de acceso, el 2.3 EcoBoost de cuatro cilindros. Es el Ford Mustang High Performance Package.
Muchos cambios, por dentro y por fuera
El Ford Mustang High Performance Package es toda una caja de sorpresas: un primer vistazo a su exterior revela una imagen más deportiva gracias a las llantas de aleación de 19 pulgadas montadas sobre neumáticos Pirelli PZero Corsa, que esconden tras ellas un equipo de frenos de altas prestaciones, heredados del Ford Mustang GT.
Además, en el frontal se distingue un pequeño splitter que mejora el rendimiento aerodinámico del conjunto, así como unas branquias en el capó para que el motor disfrute de una mejor capacidad de refrigeración. Las cubiertas de los retrovisores exteriores, en color gris magnético, redondean un conjunto muy atractivo a nivel visual.
En el interior los cambios no son tan evidentes, pero siguen siendo visibles, con unos indicadores analógicos en sustitución de dos de los aireadores centrales informando de la presión del turbo y la presión del aceite, una placa conmemorativa con el número de unidad correspondiente y molduras decorativas en aluminio.
Una nueva vuelta de tuerca para el motor 2.3 EcoBoost
Bajo el capó del Ford Mustang High Performance Package encontramos el motor de acceso a gama, un bloque 2.3 EcoBoost con 4 cilindros que gana 40 CV respecto a la versión «normal», situándose en unos respetables 330 CV con un par de 475 NM, pudiéndose combinar con una transmisión manual de 6 relaciones o una caja automática de 10 velocidades.
Para transmitir toda esta potencia al suelo el equipo de Ford Performance ha puesto a punto la parte ciclo de forma muy completa añadiendo elementos como unas barras estabilizadoras más gruesas o un diferencial autoblocante Torsen con un tarado más agresivo, a lo que hay que añadir un sistema de escape mucho más sonoro, con cuatro salidas de escape y un sistema de mariposas activas.
Con todo esto, el Ford Mustang se lanza a la batalla con su versión High Performance Package con dos principales argumentos: un precio de salida inferior al del Ford Mustang GT con motor V8, unas prestaciones comparables, con una aceleración de 0 a 100 km/h en menos de 5 segundos y una velocidad punta de 250 km/h, y una dinámica de conducción más afinada. ¿Conquistará el corazón de los amantes del muscle car por excelencia?
Fuente: Ford
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