Este Ford Mustang no es un Mustang “normal” y no, no lo decimos porque se trate realmente de un Shelby Mustang GT350R sino porque ante nosotros tenemos a una de las piezas más importantes de la historia de Shelby y por extensión del legado deportivo del Ford Mustang, un icono que ahora está a la venta y está dispuesto a ser el Ford Mustang más caro jamás vendido, pero, ¿qué lo hace tan especial?
Este Shelby Mustang GT350R es la unidad utilizada por Shelby para el desarrollo del coche y nuevas mejoras
Este Shelby Mustang GT350R es la unidad con el chasis 5r002 o lo que es lo mismo, la unidad de pruebas de Shelby, una unidad que utilizaban en Shelby como banco de pruebas rodante para nuevas piezas y soluciones técnicas dando soporte al 5R001 y al resto de las 34 unidades que compraron los clientes de esta versión, utilizándose además como modelo “demo” para estos clientes y para procesos de homologación.
Bill Clawson, un ingeniero de Ford, fue el comprador de este prototipo en 1966 quien, tras una serie de fallos en el motor original terminó montando un motor de GT40 bajo su capó, una mecánica que a día de hoy sigue presente bajo la piel de este Mustang.
Se espera que supere los 3.74 millones de dólares que costó el Ford Mustang de Bullit
El coche fue restaurado en 2010 en un proceso de 4 años en el que trabajaron antiguos empleados de Shelby y cuenta con un historial perfectamente documentado de su vida, en la que hay hitos tan importantes como la primera victoria de Ken Miles.
Ahora como parte de la colección de John Atzbach este Shelby Mustang GT350R saldrá a subasta con motivo de la 33ª edición de la Spring Classic de Mecum Auctions. La organización ha anunciado que podría convertirse en el Mustang más caro de la historia lo que implicaría pasar los 3.74 millones de dólares que costó en su momento el Ford Mustang de Bullit.
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