ESPACIOS
Cerrar CERRAR
Actualidad

5 MIN

El "otro" coche de Max Verstappen este fin de semana es un brutal BMW M4 GT3 de 600 CV de "solo" 6 cilindros que ha pilotado desde su autocaravana en Ímola

600 CV y 6 cilindros en línea. Eso es lo que ha necesitado Max Verstappen para ganar este fin de semana. Y no, no estamos hablando del monoplaza de Red Bull con el que ha corrido en el Gran Premio de Ímola, sino del BMW M4 GT3 que ha elegido Max Verstappen para circular por la pista del Nordschleife de Nürburgring desde la autocaravana donde descansa antes de la carrera.

Un BMW repartido entre cuatro para ganar las 24 horas de Nürburgring

Aunque todos los focos estaban hoy en el podio de Emilia Romagna tras una de las pocas carreras en las que Verstappen ha sufrido para ocupar el escalón más alto, Max sido capaz de ganar otra carrera simultáneamente, la de las 24 horas de Nürburgring que se disputaba en la plataforma online iRacing. Lógicamente, el neerlandés ha pilotado en los stints en los que no tenía que estar pilotando el monoplaza de F1. Tan solo unas pocas horas antes de la carrera estaba en su autocaravana en el motorhome compitiendo con su equipo de SIM Racing, Team Redline.

El BMW M4 GT3 con el que corría con el número 20 era compartido con otros tres pilotos, Diogo Pinto, Christopher Lulham y Florian Lebigre. Han logrado llegar los primeros tras 24 horas pilotando. El propio Max Verstappen pilotó durante dos turnos. El primero lo realizó la noche del sábado tras conseguir la pole en Ímola. En este turno llevó al coche del tercer al primer puesto y dejó el relevo para sus compañeros. Y el segundo turno lo realizó en la mañana del domingo tras madrugar para sacar más ventaja a sus rivales, para dejar que sus compañeros terminaran la carrera en primera posición mientras él conseguía el mismo objetivo en la carrera de F1.

BMW M4 GT3, máquina de competición de 600 CV vista en acción.

600 CV y solo 6 cilindros en el coche de competición de BMW

El coche utilizado ha sido un BMW M4 GT3. Y aunque pueda parecer irrelevante mencionarlo tratándose de una carrera virtual, lo cierto es que los vehículos se recrean a la perfección en un simulador como iRacing, donde la calidad gráfica es relevante, pero lo es todavía más el realismo al recrear el comportamiento del vehículo y su rendimiento.

El último coche de BMW M Motorsport para competir en la categoría GT3 está basado en el BMW M4. De hecho, también cuenta con el motor de 6 cilindros en línea que podría parecer poco en comparación con el V8 que llevaba el anterior BMW M6 GT3. No obstante, aunque en configuración parece similar al M4 de calle, lo cierto es que el motor del GT3 ha sido desarrollado desde el principio para competir en circuito. Por ello también ofrece una potencia superior, llegando a los 600 CV. En parte, gracias a esos dos turbocompresores con los que cuenta.

El BMW M4 GT3 también es notablemente más caro que su versión de calle, llegando a triplicar el precio de este. Y eso que se trata de un coche diseñado para que los equipos de competición ahorren en costes.

Verstappen, el loco que viaja con su simulador de carreras

Max Verstappen es un loco del SIM Racing. Cuenta con un simulador integrado en su avión privado para poder correr cuando está en el aire. También ha pedido la fabricación de un set de SIM Racing específico para llevar cuando se desplaza a las carreras de F1. Se caracteriza por su facilidad de montaje y desmontaje, lo que contribuye positivamente a su transporte entre carreras.

Todo el set de juego de Verstappen se puede instalar en la autocaravana en la que hace vida en el motorhome. De hecho, desde allí ha competido solo un par de horas antes de salir a la pista en Ímola. Tal es el nivel de afición de Max al SIM Racing que cuando se aloja en un hotel confirma con anterioridad si la calidad de la conexión a Internet es óptima, llegando en ocasiones a negociar con los gerentes del hotel la instalación y contratación de una conexión con mejor rendimiento.

Lo curioso de todo es que las carreras de SIM Racing son la experiencia más cercana y económica a la propia F1 y el automovilismo que podemos tener los mortales comunes. Aunque hacerse con un buen equipo puede parecer costoso, en comparación con lo que cuestan muchos hobbies, o preparar un coche para competir en circuito, es un desembolso muy económico. Y la experiencia de juego es valorada por pilotos de la talla de Max Verstappen. Ahí es nada. ¿Deberíamos preparar una guía de qué comprar para empezar en el mundo del SIM Racing?

Dame tu opinión sobre este artículo

Ni fu, ni fa
Me ha gustado
¡Muy bueno!

Emmanuel Jiménez

Desde el primer Gran Turismo dejó de haber suficientes coches en el mundo para llenar mi garaje. Me da igual si son coches clásicos, eléctricos, con motor V10, o con diseños radicales. Simplemente me encantan.

Cargando...