Cuando hablamos de todoterrenos y nos referimos a ellos como «4×4», hablamos de vehículos con cuatro ruedas motrices. Sin embargo, si el vehículo en cuestión tiene más ruedas, podríamos hablar de un 6×6 o incluso un 8×8. Cuando hablamos de un vehículo 10×10, estamos ante un auténtico monstruo off-road. En este caso, un gigantesco camión de origen ruso. Un tren de carretera para el Ártico, dotado con un remolque autopropulsado, capaz de soportar temperaturas de 50 grados bajo cero y vadear ríos de 1,3 metros de profundidad.
Redefiniendo la palabra imparable con un enorme camión 10×10
Si creías que un Mercedes Clase G o un INEOS Grenadier eran imparables, te recomiendo que revises tu concepto de imparable. No te quedará otra opción después de conocer al tren de carretera Ártico que la empresa rusa VPAA (Ural) comenzará a vender el 2024. Este bestial conjunto de cabeza tractora y remolque autopropulsado está diseñado para las brutales condiciones climáticas del norte de Rusia. La cabeza tractora monta gigantescos neumáticos todoterreno y es capaz de bloquear todos sus diferenciales.
Desconocemos la mecánica que monta, pero todo apunta al uso de motores Ural de 6,7 litros, seis cilindros en línea y potencias en el entorno de los 300 CV. Más que suficientes, teniendo en cuenta que superan con holgura los 1.100 Nm de par motor, y el uso de marchas cortas en combinación con una reductora. No disponemos de datos concretos acerca de sus cotas off-road, pero este camión es capaz de vadear ríos de 1,3 metros de profundidad. A tenor de las fotos, su altura libre al suelo puede rondar el medio metro – con toda seguridad.
La parte realmente inteligente del conjunto es el remolque autopropulsado. Aunque pueda ser configurado al gusto del cliente, su peculiaridad es que cuenta con un generador diésel de 136 CV. Este generador puede ser usado para alimentar todo tipo de dispositivos eléctricos, y también para alimentar un motor eléctrico de 98 CV, capaz de accionar las ruedas del remolque. Esto puede marcar la diferencia entre quedarse atascado en un obstáculo realmente complicado, o superarlo con garantías. Este sistema convierte al conjunto en un vehículo 10×10.
Toda la mecánica del conjunto, sus lubricantes, manguitos y componentes del tren de rodaje, están refrigerados y calefactados para garantizar un funcionamiento óptimo a temperaturas de hasta 50 grados bajo cero. La autonomía de este Ural es de 500 km, con una capacidad de depósitos de combustible no especificada. Por último, la cabeza tractora cuenta con un cabrestante de 8 toneladas, que servirá de apoyo en las zonas más complicadas. Si necesitas ir al fin del mundo, y quieres volver, no encontrarás mejor vehículo que este.
Su precio no ha sido detallado, ya que el proyecto está aun en desarrollo, en cooperación con dos universidades rusas. Además, las relaciones entre Rusia y occidente no están en su mejor momento. Sea como fuere, es una máquina verdaderamente impresionante.
Fotos del tren de carretera Ártico de Ural
