Una carrera espectacular trae ganadores inesperados en la cita del Super GT en Sugo

El circuito de Sugo siempre trae carreras espectaculares y sorpresas en el Super GT. Este año no ha sido una excepción y en lo que ha sido la vuelta del campeonato a la acción tras dos meses sin carreras, Nissan en GT500 y Toyota en GT300 firmaron unas victorias tan inesperadas como celebradas. Los resultados del pasado fin de semana igualan ambos campeonatos y dejan una situación fantástica para la próxima carrera en el Twin Ring de Motegi.

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Sin la disputa de la programada tercera carrera de la temporada en Autopolis, el Super GT volvió a la acción en el circuito de Sugo el pasado fin de semana por primera vez desde el mes de mayo. Pero la espera valió la pena y Sugo no decepcionó en su tradicional cita con el espectáculo. Desde el primer momento había ya la tensión esperable que venía con una lluvia ligera suficiente como para alterar el estado de la pista pero no para salir con neumáticos de lluvia. Mientras tanto, el Nissan Calsonic debía salir desde el carril de boxes por daños en su máquina.

Las primeras vueltas trajeron sorpresas y dramas en la categoría grande del Super GT, con un toque entre el Honda ARTA y el Nissan de Kondo Racing que terminó con el primero trompeado en un lugado muy delicado. De la misma forma, el Lexus del Team LeMans que partía desde la pole position golpeó a un doblado cuando iba en primera posición. La consecuencia fue un trompo en la primera curva que entregó la cabeza de carrera al Honda del equipo Keihin, aprovechando una situación poco favorable de los rivales de las otras marcas.

La carrera aún vivió un coche de seguridad por un accidente de un coche del GT300 y un toque entre el Lexus Zent y el Honda Keihin que lideraba la carrera. También hubo sanción para el Lexus TOM’S número 36 por haber cambiado el monocasco tras un accidente en un test -en Japón cambiar el monocasco conlleva sanción en la siguiente carrera-. Sin lluvia y con todas las paradas en boxes realizadas, en cabeza se encontró el Nissan de Kondo Racing tras haber realizado una estrategia arriesgada pero resultona con los neumáticos Yokohama.

El coche número 24 paró a boxes de forma normal pero decidieron no cambiar neumáticos, a diferencia de los rivales. Esto les dio una importante ganancia de tiempo que les dejó en primera posición tras las paradas y con el estado de las gomas más que correcto, consiguieron llegar en primera posición hasta que salió la bandera roja a falta de seis vueltas por un nuevo accidente en GT300 -no se reinició por haber disputado más del 75% de carrera-. La segunda posición fue Lexus Zent y la tercera, para el Lexus SARD. Un final decepcionante puesto que las últimas vueltas tenían una batalla a cuatro bandas que habría sido una gozada ver en un circuito como Sugo. ¡Pero siempre queda el año que viene!

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Desde el momento de la salida, la emoción estaba garantizada en la siempre animada categoría «pequeña» del Super GT. La lluvia anterior a la partida aseguró la tensión necesaria al enfriar la pista pero no empaparla lo suficiente como para partir con neumáticos de agua. En el momento de la salida, el Subaru BRZ fue el más veloz y tomó la cabeza de carrera del Toyota 86 chasis estándar número 25 del Team VivaC Tsuchiya que había marcado la pole position. Paralelamente, otro chasis estándar sufría con un trompo del Lotus Evora.

Las salidas de pista fueron las protagonistas del GT300 con un toque de uno de los Mercedes SLS con un GT500 que sorprendentemente no se llevó ninguna penalización. Pero fue el Toyota 86 del Team Mach, el que causó el primer gran cambio de la carrera con su salida de pista que causó la presencia del coche de seguridad. Mientras tanto y a pesar de partir desde la vigésimo primera posición, el Nissan NDDP número 3 estaba en medio de una gran remontada que les llevaba a la zona de puntos.

Tras realizar todas las paradas, la carrera quedó con tres coches luchando por la primera posición. El líder era el Lamborghini número 88 del JLOC, que había realizado la misma estrategia que el Kondo Racing en GT500 al no cambiar neumáticos. Desafortunadamente para los del coche italiano, la idea no funcionó igual de bien en la clase pequeña y tanto el Toyota Prius número 31 como el Toyota 86 de VivaC acabaron adelantándole. Pero por detrás, fue el accidente del Toyota 86 chasis estándar que rodaba cuarto -Upgarage Bandoh-, el que causó una bandera roja que puso punto final a la carrera.

De esta forma, la victoria fue para el Toyota Prius híbrido número 31, el que usa neumáticos Bridgestone y un condensador eléctrico -el número 30 usa neumáticos Yokohama y baterías-, mientras que el segundo puesto fue para el Toyota 86 número 25. Tercero finalizó el Lamborghini número 88 y tras una carrera digna de mención, el Nissan GT-R GT3 de NDDP finalizó en una nada despreciable quinta posición. Cada año Sugo promete emociones fuertes y este año no fue distinto, regalando a todos un buen fin de semana aunque no tuviera las últimas vueltas de espectáculo que todos deseaban.

Clasificación general GT300

Sitio oficial | SuperGT.net