Kimi Räikkönen es un piloto de Fórmula 1, uno de los cuatro campeones del mundo en activo y el último en triunfar para Ferrari en la categoría reina junto a Lewis Hamilton, Sebastian Vettel y Fernando Alonso. El finlandés es piloto de la Scuderia Ferrari, equipo con el que logró su único título en la categoría reina y en el que militó entre 2007 y 2009 en su primera etapa y desde 2014 en su segunda. Es uno de los pocos pilotos que logró volver al equipo italiano después de haber cambiado de aires. Räikkönen es conocido por ser especialmente competitivo a la hora de firmar vueltas rápidas y por su carácter poco dado a las superficialidades de la Fórmula 1.
INICIOS EN COMPETICIÓN
La carrera deportiva de Räikkönen en el karting estuvo repleta de éxitos en su Finlandia natal. Aún así, quizás los momentos más memorables de su tiempo antes de los monoplazas se dieron en Mónaco, donde una vez rompió el volante de su kart y aún así siguió en carrera. En otra ocasión tuvo un incidente que le dejó al otro lado de las barreras de seguridad y tras físicamente meter de nuevo el kart en pista, remontó hasta el tercer puesto. En 1998 se convirtió en campeón nórdico en Varna, Noruega, y en 1999 logró el segundo puesto en la Fórmula Super A bajo las órdenes de Peter de Bruijn, campeón del mundo de 1980. Su carrera en el karting, combinada con el servicio militar dividido en etapas para no interrumpir su progreso deportivo, le garantizaba subir a los monoplazas y eso mismo hizo en 1999.
En primera instancia, Räikkönen compitió en el certamen europeo de Fórmula Ford y el Festival de Fórmula Ford, siguiendo luego con la Formula Renault Winter Championship, su primer título en el año 2000. El finlandés siguió con una participación puntual en la Fórmula Renault 2000 Eurocup combinada con su presencia a tiempo completo en la Fórmula Renault 2000 Reino Unido, donde fue campeón con Manor. Con veintitrés carreras de monoplazas a sus espaldas y trece victorias, su vida estaba a punto de dar un vuelco gracias al 'premio' recibido en forma de test con Sauber. Su bautismo de fuego llegó en el circuito de Mugello en septiembre del año 2000. Después de impresionar tanto en Italia como luego en Jerez y en Barcelona, Peter Sauber le ofreció un contrato para 2001.
DEBUT EN FÓRMULA 1
Kimi Räikkönen era ya una realidad, a pesar de las críticas de varios expertos dentro de la Fórmula 1 entre los que se encontraba el mismísimo presidente de la FIA, Max Mosley. La Superlicencia se le otorgó de forma provisional aunque el Gran Premio de Australia disipó cualquier duda que existiera sobre sus capacidades. Su primera temporada en la Fórmula 1, la completó con cuatro resultados entre los seis primeros y un total de nueve puntos, ayudando a Nick Heidfeld a lograr un histórico cuarto puesto en la clasificación de constructores. A pesar de los rumores que le relacionaban con Ferrari (su compañero de equipo era quien más sonaba para McLaren), tomó el lugar de un Mika Häkkinen que oficialmente se tomaría un año sabático.
Su primer año en un equipo potente fue sólido y logró un tercer puesto en su debut con el equipo británico en Australia. Su primera victoria llegó en Malasia al año siguiente, en una temporada que le vio pelear por el título con Juan Pablo Montoya y Michael Schumacher. Este último le batió por solo un punto. Su tercer año con McLaren fue algo más difícil, sufriendo con un MP4-19 que era frágil y lento, aunque el buen trabajo en la versión 'B' le permitió ganar el Gran Premio de Bélgica. Era solo su segunda victoria pero ya era considerado como un piloto capaz de pelear por ser campeón. Esa batalla llegó en 2005 aunque fue batido por un Fernando Alonso que contaba con un coche algo más lento pero mucho más fiable. Después de un 2006 en el que McLaren volvió a verse superada por Ferrari y Renault, llegó el momento de un cambio de aires.
La retirada de Michael Schumacher de la Fórmula 1 abrió un apetitoso espacio en la Scuderia Ferrari, equipo que había dominado la categoría entre 2000 y 2004 y que se encontraba en pleno proceso de recuperación. Schumacher había estado cerca de ser campeón de nuevo en 2006 y con Felipe Massa como compañero, Räikkönen entraría como la nueva estrella en 2007. Su debut no pudo ser mejor, logrando una espectacular e inesperada victoria en Melbourne. La tónica de la temporada fue la de un duelo entre Ferrari y McLaren en medio del cual Räikkönen logró cinco victorias más, destacando entre ellas la del Gran Premio de China (triunfo número 200 de Ferrari en la F1) y la del Gran Premio de Brasil, en el día en el que se proclamó campeón del mundo por un solo punto en una carrera ya histórica.
La remontada del nuevo campeón en 2007 situaba a Räikkönen como gran favorito para 2008 pero una ligera caída de rendimiento junto con una importante falta de fortuna y el buen trabajo de Hamilton y Massa dejaron al número 1 fuera de la lucha por el título. Si en 2007, 'Iceman' había contado con la ayuda de su compañero de equipo en su lucha particular, en 2008 los roles se invirtieron. A pesar de lo extraño de la situación, el campeón en título se convertía en escudero del número 2 de Ferrari y en el Gran Premio de Brasil cedió su posición al héroe local, que casi logró el título. En cuanto a Räikkönen, fue tercero en la general con 'solo' dos victoria en Malasia y España. Para 2009, el objetivo era recuperar el título aunque la temporada que venía por delante iba a tener escasos éxitos.
La única victoria que iba a lograr Kimi Räikkönen a lo largo de la temporada 2009 llegó en el Gran Premio de Bélgica, en un Spa-Francorchamps que es el circuito fetiche del último campeón de Ferrari. Aún así, el año fue complicado y la sexta posición final debía ser considerada casi un éxito teniendo en cuenta la falta de competitividad del F60. Con un total de cinco podios, habría sido lógico esperar su continuidad con Ferrari pero en Maranello tenían planes distintos que incluían fichar a Fernando Alonso para reemplazarle y pagarle su contrato para asegurarse que no estaba en un equipo rival en la Fórmula 1. De esta forma, llegaba a su fin el camino de Räikkönen en la categoría reina. Su siguiente paso sería ir al Campeonato del Mundo de Rallies, una disciplina en la que ya había hecho sus pinitos en clases inferiores.
El debut de Kimi Räikkönen en el mundo de los rallyes se produjo en el Arctic Lapland Rally a principios de 2009 con un Fiat Abarth Grande Punto S2000 preparado por su compatriota, Tommi Mäkinen. El resultado no fue nada desdeñable, con una décimo tercera posición final que le animó a dar otro paso al participar en el Rally de Finlandia de 2009 con el mismo coche. Para ello, Räikkönen tuvo que viajar a Finlandia y empezar la prueba cuatro días después del GP de Hungría donde fue segundo. Llegó a estar en décimo quinta posición de la general y tercero en su clase, antes de sufrir un accidente en el último tramo del sábado.
Al dejar la Fórmula 1, en diciembre de 2009 Räikkönen anunció su paso al WRC para 2010 como piloto del Citroën Junior Team, pilotando un C4 WRC con Kaj Lindström como copiloto. Sus primeros puntos llegaron con un octavo puesto en Jordania, convirtiéndose en el segundo piloto en lograr puntos en los campeonatos del mundo de Fórmula 1 y de rallyes. En Turquía logró ser quinto, batiendo a pilotos con más experiencia y en Alemania logró su primer 'scratch' en el último tramo del evento. Su primera victoria en el mundo de los rallyes llegó en el Rallye Vosgien de 2010, una prueba de asfalto en la que se impuso en todos los tramos disputados.
Después de un primer año complicado en el que fue décimo con cinco resultados en los puntos, la expectativa para 2011 era mejorar a bordo del nuevo DS3 WRC, aunque ahora en su propio equipo, el ICE 1 Racing. Desafortunadamente para el entonces expiloto de Fórmula 1, los resultados no acompañaron especialmente y dependiendo de su propio bolsillo, el programa parcial quedó demasiado reducido para poder ser aceptado dentro del campeonato de equipos. Al final, lo mejor del segundo año fueron dos sextos en Jordania y Alemania y aunque puntuó en seis ocasiones, volvió a ser décimo en la general.
Más allá de su paso por el WRC, Räikkönen tuvo también un breve paso por la NASCAR. A principios de 2011 firmó un contrato con Kyle Busch Motorsports para tomar parte en varias carreras de las Truck Series. Su debut se produjo en Charlotte, en Carolina del Norte, con un destacable décimo quinto puesto como resultado. Más adelante, ese mismo año tomó parte en una carrera de las Nationwide Series, también en Charlotte. Esta vez compitió para el NEMCO Motorsports de Joe Nemechek, finalizando en vigésimo séptima posición tras dañar su coche por culpa de una sanción por exceso de velocidad en el pit-lane, además de problemas con restos de otra máquina. Räikkönen llegó a probar el coche de Robby Gordon en Sonoma pero una salida de pista le dejó sin competir en la que habría sido su primera carrera en las Cup Series, la clase principal de la NASCAR.
A lo largo de los últimos meses de 2011, los rumores sobre el posible retorno de Räikkönen a la Fórmula 1 empezaron a recorrer el paddock de la categoría reina, sobre todo tras ser visto en Grove en la sede del equipo Williams. A finales de noviembre, se anunció el fichaje del finlandés por el equipo Lotus para la sucesiva temporada 2012. El comienzo de su segunda etapa en la categoría reina fue relativamente complicado pero pronto se volvió a mostrar competitivo, siendo capaz de extraer buen rendimiento del Lotus E20, a la vez que lideraba la escuadra con Romain Grosjean como compañero de equipo. Entre los mejores resultados del año hubo que destacar un total de seis podios entre los que se encontró una victoria en Abu Dhabi, camino al tercer puesto de la general.
Tras ese único éxito en 2012, Räikkönen volvió a encontrarse con la victoria en la primera carrera de 2013 en Australia, antes de completar un año decente con ocho podios aunque sin participar en las últimas dos citas por una operación en la espalda. Su reemplazo, Heikki Kovalainen, no logró grandes resultados, remarcando el buen trabajo el excampeón del mundo a lo largo del que fue el último año en el que logró ganar alguna carrera. En septiembre, se había anunciado que en 2014 "Iceman" volvería a ser piloto de Ferrari. Desafortunadamente para él, su retorno a Ferrari resultó muy decepcionante y en todo 2014 no logró subirse al podio ni una sola vez, siendo el cuarto puesto en Bélgica su mejor resultado de la temporada.
La temporada 2015 vio una mejoría de su rendimiento, en buena parte gracias a la competitividad del SF15-T. Ello le permitió luchar por la victoria en Bahréin, donde logró subirse al podio con el equipo italiano por primera vez desde 2009 aunque Sebastian Vettel fue el claramente el mejor de los dos Ferrari con tres triunfos. Los Grandes Premios de Singapur y Abu Dhabi volvieron a verle en el top 3, lo que le permitió terminar en cuarta posición final en la clasificación general. En 2016, a pesar de ser sexto al terminar el año, estuvo más cerca de un Vettel que pasó un año difícil. En 2017, Räikkönen siguió con su mejoría en competitividad, de nuevo ayudado por un mejor Ferrari que le ayudó a lograr una celebrada pole position en Mónaco. Tras los cuatro podios en 2016, logró un total de siete en 2017 y volvió a la cuarta posición final. Aún así, las sensaciones en las carreras de Mónaco, Hungría, Singapur y Malasia fueron lo suficientemente buenas como para que hubiera optado a la victoria en condiciones normales, certificando su buen estado de forma.
Llegaría en 2018, con motivo del Gran Premio de Estados Unidos, último triunfo del finlandés antes de despedirse de la Scuderia Ferrari cinco años después del cosechado con Lotus, y así dirigirse a Alfa Romeo Sauber de cara a 2019. Kimi firmaba un contrato por dos temporadas, alargando su carrera deportiva hasta los 40 años. Su resultado a final de temporada sería el tercer puesto de la clasificación general, en este caso con solo dos puntos de ventaja sobre Max Verstappen y cuatro respecto Valtteri Bottas. La Pole Position en el Gran Premio de Italia terminó por culminar una de las temporadas más completas por parte del finés.
La llegada a Alfa Romeo Racing liberaba de la presión de tener que luchar por las victorias y contribuir al campeonato de constructores para Ferrari. El finlandés, el piloto más veterano de la parrilla de largo tras la marcha de Fernando Alonso, consiguió batir de forma clara a Antonio Giovinazzi, su nuevo compañero de equipo, sumando para la estructura con sede en Hinwil hasta 31 puntos en la primera mitad del calendario.
A partir de ahí, el rendimiento del monoplaza caería en picado, coincidiendo con el repunte de la competitividad de los McLaren y Renault, por lo que le resultó muy difícil a Kimi Räikkönen hacerse un hueco entre los 10 primeros en las pruebas restantes en una carrera en condiciones normales. Sería en Brasil donde el finés conseguiría su mayor botín de puntos del año, amarrando una cuarta plaza tras Carlos Sainz Jr., la cual se convertiría en el mejor resultado de la estructura dirigida por Peter Sauber desde la temporada 2013. A final del año, Kimi sería 12º en la general con 43 puntos.
En 2020 sí que no hubo milagros. Alfa Romeo dio un paso atrás junto al rendimiento de los motores Ferrari, por lo que ni Antonio Giovinazzi ni el propio Räikkönen estuvieron en disposición de acercarse, aunque circunstancialmente, al podio. El finlandés terminó únicamente dos veces dentro de los puntos, curiosamente en dos de las tres pruebas italianas disputadas, siendo noveno tanto en Mugello como en Imola, logrando cuatro puntos que le llevaron a acabar decimosexto, empatado a puntos con su compañero de equipo, al que le ganó la posición por el valor de sus resultados, ya que por reglamento, dos novenos puestos en dos Grandes Premios, valen más que un noveno y dos décimos, a pesar de que reporten la misma cantidad. A pesar de ello, en Hinwil apostaron por la experiencia y la estabilidad y renovaron a ambos competidores.
CURIOSIDADES
Pero más allá de lo deportivo, si por algo es conocido y adorado Kimi Räikkönen, es por su peculiar personalidad poco dada a involucrarse en el mundo del faristeo de la Fórmula 1. Aficionado absoluto del mundo del motor, prefiere subirse a cualquier vehículo y dar vueltas hasta cansarse que hablar con la prensa, algo que a menudo hace como mera obligación y con relativa desgana. En alguna ocasión, el finlandés ha participado en alguna carrera de motos de nieve con el sobrenombre "James Hunt", hombre a quien el piloto de Ferrari admira por el parecido de sus personalidades. Cuando estaba en Lotus, Räikkönen lució un casco homenaje al campeón británico en el Gran Premio de Mónaco.
Otro de los grandes momentos de "Iceman" se vivió en el Gran Premio de Malasia de 2009, cuando después de verse forzado a retirarse, se tomó un helado y un refresco en lugar de sentarse con el equipo a analizar la carrera. Un hombre que en la mayoría de casos hace lo que quiere y cuando quiere. Un piloto totalmente anacrónico que a pesar de todo consigue cuajar en la Scuderia Ferrari en base a su carácter privado y su estrecha relación con el personal del equipo y su relativamente cercana amistad con Sebastian Vettel.
Kimi Räikkönen es un piloto inescrutable, a pesar de sus recientes incursiones en el mundo de las redes sociales a través de Instagram. Aún así, como un joven que creció entre los dos milenios, el finlandés cuida su imagen aunque sea a su manera. En ese sentido, es quizás contradictorio con su personalidad percibida que Räikkönen valore detalles como el diseño de su casco. Allí se pueden ver dos de sus símbolos más usados. El primero, es la inscripción "Iceman", adecuada por sus orígenes y su pilotaje... aunque curiosamente es un hombre de sangre caliente en pista, como lo atestiguan sus mensajes por radio y su constante búsqueda de la vuelta rápida. El mote llegó en sus primeros años de McLaren y se ha mantenido hasta la actualidad.
El otro símbolo, mucho menos conocido, es la "M" o "V" (según en qué dirección se mire) de la zona superior de su casco. Para unos, simboliza un pájaro en mitad del vuelo. Otros, dicen que ese diseño es una modificación de la runa "Algiz", que significa "protección". Muy adecuado, si fuera cierto. En cuanto al dorsal de Kimi Räikkönen, no hay demasiado misterio al respecto. Tras haber usado los números 17, 4, 6, 9 y 1 a lo largo de su carrera, en 2013 estrenó el 7. Cuando en 2014 la FIA pidió a los pilotos que eligieran sus dorsales, Räikkönen racionalizó que el 7 era el que venía usando y que no había motivo para cambiarlo. Dicho y hecho. Bwoah.