El año se acaba. Y eso significa que en apenas unas horas entrará en vigor una de las medidas más polémicas de cuantas haya impulsado la Dirección General de Tráfico en los últimos años. A partir de la media noche, a partir del 1 de enero de 2026, la famosa baliza V-16 conectada comenzará a ser obligatoria, siendo el dispositivo oficial de preseñalización de peligro que según la normativa deberemos utilizar si nuestro vehículo queda inmovilizado en la vía, ya sea por accidente, o avería.
A unas horas de que la V-16 conectada impulsada por la DGT sea obligatoria
Y en las últimas horas siguen llegándonos noticias que conciernen a una medida que durante todo el proceso no solo a estado sujeta a polémicas, sino también a numerosos interrogantes por parte de los conductores, en las que algunas informaciones, a menudo contradictorias, enviadas desde el organismo máximo responsable de la política y seguridad vial, han contribuido aún más a exacerbar las dudas e incluso las especulaciones.
Estos días ya os contábamos incluso como algunas balizas V-16 conectadas que se habían comercializado legalmente habían sido prohibidas, venciendo su vigencia y por lo tanto cesándose su comercialización, con una aclaración por parte de la DGT que sí permitirá su uso hasta el fin de su vida útil.
La DGT recula y cede a la presión
Con la introducción de la V-16 conectada, la famosa baliza luminosa se convierte, según el Reglamento General de Vehículos, y el artículo 130 del Reglamento General de Circulación, no solo en un elemento obligatorio, sino también en el único dispositivo de preseñalización de peligro.
De ahí que una de las preguntas más frecuentes, especialmente para los que aún albergamos dudas con respecto de la efectividad de la baliza V-16 conectada para señalizar un vehículo inmovilizado, en ciertas circunstancias, pasase por conocer si aún podríamos seguir utilizando los famosos triángulos que hasta ahora llevábamos en nuestros coches.
Desde estas líneas ya recomendamos no deshacernos de ellos. No obstante, las dudas con respecto a las consecuencias que podría tener su utilización eran, de nuevo, más que razonables, especialmente desde que el Director General de Tráfico, Pere Navarro, se refiriera a este respecto comentando «no está prohibido el triángulo, si tú quieres tener un triángulo, y quieres bajar a colocar el triángulo, allá tú».
En las últimas horas conocíamos otra noticia. Con vigor desde el día de ayer, 30 de diciembre de 2025, y por la vía de la instrucción 2025/20, la Dirección General de Tráfico ha admitido tácitamente el uso de los triángulos como sistema de preseñalización de peligro. Y decimos tácitamente por el hecho de que esta instrucción, dirigida a todas las unidades del organismo, no regula específicamente su utilización, sino que descarta la sanción, multar al conductor, que utilice el triángulo para señalizar su vehículo inmovilizado, aclarando que «no tendrá la consideración de obstáculo en la vía y por tanto no será objeto de denuncia».
No obstante, insistimos en que a partir de esta media noche, del 1 de enero de 2026, la baliza V-16 conectada será el único dispositivo de señalización de peligro, y eso implica que independientemente de que utilicemos los antiguos triángulos, o no, el uso de la V-16 conectada seguirá siendo obligatorio.
