El 300 Tdi es uno de los mejores motores que ha tenido el Land Rover Defender a lo largo de su historia. Algunos dirán que el mejor. Es tan suave como lavarse la cara con papel de lija, ruidoso y lento, pero es duro y fiable a más no poder. El Defender que protagoniza este artículo, con 855.714 kilómetros en el marcador, es una buena prueba de ello.
No quiero ponerme en modo abuelo cebolleta, pero el caso que nos ocupa bien merece decir eso de «ya no se hacen motores como los de antes». No me entendáis mal: nunca ha habido motores tan eficientes como los actuales. Pero son demasiado complejos para que duren lo mismo que los más fiables de antes.

Land Rover Defender
Hay un perfil en X llamado «Kilometradas imposibles» que enseña coches con una cantidad increíble de kilómetros. Normalmente son coches extranjeros, pero esta vez le ha tocado a un Defender 300 Tdi con matrícula de Ciudad Real. No me diréis que Internet no es maravilloso.
Land Rover Defender 110 with 855 714 km on the clock pic.twitter.com/iSzXHAwho3
— Mileage impossible (@Mileage_impo) May 21, 2025
En el mensaje publicado por Mileage impossible aparecen dos fotos por fuera y una del marcador, que muestra la friolera de 855.714 kilómetros. Siendo honestos, no sabemos si conserva el motor original o ha tenido algún cambio, pero dado el motor que es, muy probablemente sigue llevando el original.
300 Tdi, el motor más duro para el Defender
El Defender de las imágenes está matriculado en 1998, el último año que se vendió con el motor 300 Tdi antes de pasar al más moderno Td5. El 300 Tdi era sencillo en su diseño, pensado para repararlo en cualquier sitio en caso de avería. Su bloque estaba hecho de hierro fundido y la inyección era mecánica. No tenía nada de electrónica.
El 300 Tdi es seguramente el motor diésel más fiable que ha tenido el Defender. Por eso es perfectamente plausible que el Defender blanco de las imágenes tenga todavía su motor original. Bien mantenido, este motor puede durar hasta el fin del mundo.
También es el motor favorito para muchos amantes del Defender. Incluso a día de hoy sigue siendo restaurado y vendido como «motor de reemplazo» y aunque no es el más moderno, sigue siendo muy buscado.
Un 2.5 turbodiésel con 110 CV y fuerza desde muy abajo
El servidor que escribe tuvo un Defender de la época con ese mismo motor. Era lento como una tortuga anestesiada: alcanzaba los 100 km/h pero tenías que ser paciente. Te obligaba a bajar una marcha del estresante ritmo de vida actual y eso también era parte de su encanto. Tenía algún resude de aceite, pero nunca llegó a manchar el suelo. Y nunca necesitó nada más que el mantenimiento correspondiente.
Con 2.5 litros de cilindrada, cuatro cilindros y turbo, declaraba 110 CV de potencia. La clave estaba en su entrega de par desde muy abajo. Entrega el par máximo (265 Nm) a solo 1.800 rpm. El Td5 que llegó después era un motor más moderno y refinado. Tenía cinco cilindros, inyección electrónica y era más potente, algo que se notaba sobre todo en carretera. Y aunque no es mal motor, nunca fue tan duro.
Imágenes Land Rover Defender Classic V8 Soft Top






Imágenes Land Rover Defender Octa





