El BMW X6 comenzó en 2008, cuando llegó al mercado español, una tendencia que hasta el día de hoy perdura y no parece que vaya a desfallecer con base en cómo están trascendiendo los acontecimientos en estos últimos compases. Fue el primer SUV de estilo coupé en lanzarse al mercado y, desde entonces, ha sido imitado por muchos.
Aun así, lo cierto es que en el campo de los coches de carácter económico, o al menos entre aquellos que el grueso del público tiene en su poder adquirir, no ha tenido demasiadas imitaciones. Una de las más exitosas, tal vez por lo reducido de su concepto a su nivel, ha sido el Renault Arkana, un SUV que se encuentra afrontando, casi con toda seguridad, sus últimos compases a la venta en Europa.
Imágenes del Renault Arkana






Y es que, aunque muchos han querido seguir una estela similar a la del Renault Arkana tras constatarse que unir la idea de un SUV de carrocería coupé a un precio contenido era una fórmula de éxito, lo cierto es que ningún coche ha tenido un perfil con una caída del techo tan marcada como al del Arkana. El Volkswagen Taigo, basado en el T-Cross, ha sido uno de ellos, pero sus ventas han estado muy lejos de los registros del Arkana en Europa.
Otro aspecto que ha ayudado en gran medida al Arkana ha tener éxito entre quienes buscaban esa imagen de coupé dentro de un SUV, está en un apartado que se ha por inherente cuando se empieza a buscar un coche así: hablamos de la altura libre al suelo. Y es que, con nada menos que 20 centímetros de separación entre su punto más cercano al suelo y sus bajos, lo cierto es que el Arkana tiene una altura más propia de un todocamino que de un SUV, pues los todoterreno con mejores capacidades empiezan esta cota en la zona de los 21 o 22 centímetros. Esto, junto a el perfil de su carrocería y una longitud de 4,57 metros, otorgan a este crossover una presencia más propia de un C-SUV que de un B-SUV, que es a donde pertenece realmente por la arquitectura técnica en torno a a la que se ha desarrollado. Aun así, gracias a la longitud, el maletero ofrece 480 litros de volumen de carga.
Aun con una exitosa trayectoria a sus espaldas y con una fórmula que ha demostrado convencer al público, la realidad es que parece que el Renault Arkana no va a tener un sucesor, o al menos que no va a tratarse de un relevo directo. Su renovación tuvo lugar el pasado año, tuvo un calado muy ligero y en ella no se apostó por dotar al Arkana de uno de los puntos que más identidad está brindando a los últimos lanzamientos de Renault: el sistema de información y entretenimiento como sí sucedió con el Captur, por ejemplo.
Aun así, la realidad es que optar por el Arkana aunque sea en estas más que probables últimas etapas de su comercialización, sigue teniendo mucho sentido. Se ha eliminado, no obstante, la versión que hasta hace poco representaba el acceso a su gama, la denominada Evolution.
Sin tener que optar por la variante Sprit Alpine, que es la más cara, por tanto, la opción más lógica sobre el papel es la de la línea denominada Techno, y en conjunto con la interensante mecánica híbrida de 145 CV de potencia, que es una híbrida convencional y no una híbrida ligera, que han desaparecido de la gama en estos últimos compases. Tiene un precio que arranca en los 31.312 euros sin tener que ser ligado a una financiación, algo no muy habitual cuando se trata de ofertas.
Lo más llamativo de este motor es que logra un consumo homologado de 4,5 litros, que es completamente alcanzable en circunstancias de uso real, especialmente si se circula una gran parte del trayecto diario por circunvalaciones de una gran ciudad a velocidades legales o en ámbito urbano, donde este tipo de mecánicas saca su mejor cara. El 0 a 100, por su parte, lo logra en 10,8 segundos, demostrando solvencia pero no brillantez en este apartado.
En términos de equipamiento, para acabar, el acabado Techo se antoja bien dotado de serie, pues ofrece, entre los elementos más destacables elementos como cuadro de instrumentos con pantalla TFT de 10,2 pulgadas, pantalla central de 9,2 pulgadas, llantas de 18 pulgadas acabadas en doble tono, faros de led, sensores de aparcamiento, cristales traseros sobretintados, retrovisores exteriores regulables y abatibles eléctricamente, cámara de visión trasera, retrovisor interior con sensor de luz (es oscurece automáticamente), entre otros.
Imágenes del Renault Arkana





