Lo clásico está de moda. Los fabricantes han encontrado en esa línea restomod una buena oportunidad para volver a tender puentes con los conductores, esas mismas conexiones entre marcas y ‘consumidores’ que parecían haberse perdido en parte con la electrificación. Skoda es el último que ha querido traer esos recuerdos del pasado con una propuesta por parte de sus diseñadores que tiene mucho aroma de nostalgia.
Y es que el Skoda Favorit fue para muchos ese primer coche en la década de los ochenta, un símbolo que, con el paso del tiempo y la nueva realidad sociopolítica europea también supuso una herramienta de libertad, de moverse entre países más allá de muros y de telones. Para el fabricante con sede en Mladá Boleslav, también fue la oportunidad para asomar la cabeza en medio de unos momentos financieros complicados, tras lo que Skoda entró directamente en el radar del Grupo Volkswagen.

Skoda Fabia






Con todo ello en mente, era la oportunidad perfecta para sondear lo que podría suponer la llegada de un posible Skoda Favorit del Siglo XXI, por lo que el diseñador Ljudmil Slavov se puso manos a la obra y tras estudiar el modelo original, se propuso evolucionar las líneas partiendo de la idea de imponer un estilo minimalista, en la línea del Modern Solid que estrenó el fabricante checo en 2022.
El reto fue mayúsculo, ya que, suponía en este caso transformar esas líneas tan clásicas, propias de la Europa del otro lado del Telón de Acero, con líneas muy sencillas, con apariencia de robustez y primando la versatilidad. Esto ha llevado al diseñador a tener que emplearse especialmente a fondo para reconvertir esa imagen a una mucho más moderna utilizando recursos muy originales como el de introducir las ópticas, tanto delanteras como traseras, en un marco que puede replicar la forma de las originales, mucho más grandes que las actuales con tecnología LED y forma de boomerang.
Aunque el capó delantero, ahora integrado en el frontal de una pieza trata de mantener esas dos molduras longitudinales, sí que es cierto que llama la atención la ausencia de la entrada de aire superior, una pieza que ya no está y, aunque las formas (incluidos los ángulos de los parabrisas y ese característico Pilar C) y dimensiones principales sí que parecen haberse respetado, al igual que es diseño clásico del interior, es evidente que falta la integración de otros elementos. Se echan de menos otros guiños como los paragolpes en acabado plástico negro, las manillas de las puertas o esa peculiar cintura lateral que reinterpreta en el caso del Favorit moderno de una forma mucho más sutil y al estilo ‘SUV’.
Por ahora, en la marca dicen que no deja de ser un homenaje al icónico Skoda Favorit, pero recientemente ya tenemos esa experiencia con lo sucedido con otras marcas y firmas como Hyundai, Honda o Renault se han animado a dar pasos en firme hacia la producción en serie de vehículos eléctricos con estéticas claramente influenciadas por sus modelos de antaño preferidos por todos aquellos que se animaron a recorrer Europa sobre cuatro ruedas.
Galería de imágenes – Skoda Favorit Siglo XXI:





