En el dique seco, al menos eso es lo que ha querido transmitir el presidente de los Estados Unidos haciendo una vez más uso de su propia red social. Donald Trump ha hecho temblar de nuevo los mercados europeos después de asegurar que las negociaciones comerciales con la Unión Europea “no van a ninguna parte”, por lo que empieza a sobrevolar la sombra de que los aranceles sobre los productos procedentes del Viejo Continente puedan incrementarse una vez más, incluyendo por tanto también la industria automotriz.
Y es que Trump ha puesto sobre la mesa la posibilidad de que esos gravámenes sobre los productos europeos que entren en el mercado estadounidense puedan aumentar hasta el 50%, algo que, sin lugar a dudas, significaría para muchas empresas el final de su presencia en el país norteamericano.
«¡Nuestras conversaciones con ellos no van a ninguna parte! Por lo tanto, recomiendo un arancel directo del 50% para la Unión Europea a partir del 1 de junio de 2025», anunciaba el propio Presidente a través de su perfil en Truth Social, a lo que añadiría que «no se aplicará ningún arancel si el producto se fabrica en Estados Unidos” y que considera que la Unión Europea se está aprovechando “de Estados Unidos en el ámbito comercial».
Una declaración contundente que sin duda está comenzando a afectar en los mercados al cierre de este viernes ante la cercanía del final del mes de mayo y una nueva amenaza por parte de Donal Trump, la cual llega precisamente unas horas antes de la reunión que en principio van a tener el comisario de Comercio y Seguridad Económica, Maros Sefcovic, y el representante de Comercio de Estados Unidos, Jamieson Greer, en lo que sin lugar a dudas será
“Sus poderosas barreras comerciales, el IVA, las ridículas sanciones corporativas, las barreras comerciales no monetarias, las manipulaciones monetarias, las demandas injustificadas contra empresas estadounidenses, entre otras, han generado un déficit comercial con EE. UU. de más de 250 millones de dólares anuales, una cifra totalmente inaceptable”, resumía el propio Trump para justificar una medida tan dura como la de aplicar ese 50% de aranceles a la entrada del producto europeo.
Recordemos que, Trump, en el denominado como ‘Día de la liberación’, el pasado 2 de abril, se anunció la imposición de aranceles del 20% para la Unión Europea, a lo que le siguió una escalada también en cuanto a los gravámenes aplicados sobre los productos chinos después del enfrentamiento dialectico con las autoridades del gigante asiático. Aunque se estableció una suspensión provisional por 90 días, los automóviles y las ‘Autoparts’ provenientes de la UE siguieron siendo gravadas con el 25%. En caso de que se cumpla esta nueva imposición por parte del Gobierno estadounidense, Bruselas también tiene previsto aplicar sus propias represalias en forma de aranceles a los productos importados de EE. UU.