En un momento en que las propuestas todoterreno están triunfando – no hay más que ver lo que están consiguiendo marcas como Voge que ha conseguido que la primera, la segunda, y la tercera más vendidas el mes pasado en España sean suyas – la idea de esa moto de filosofía enduro, que es capaz de desenvolverse con garantías por un camino completamente roto y mantenerse de una pieza, pero también ser un producto de garantías que cumpla en el día a día en la ciudad, parecía que podría tener más sentido que nunca.
La Yamaha que soñaste tener de chaval
Y esa podría ser la jugada más interesante de esta Suzuki que acaba de llegar al mercado. Una moto indestructible, y relativamente sencilla, con 125 centímetros cúbicos y un motor moderno de refrigeración líquida que prima unos consumos decentes y un mantenimiento sencillo, incluso cuando se cubre de polvo y barro.
Con esta carta de presentación solo faltaba que el precio de la nueva Yamaha WR125R acompañase. Y dentro de que seguimos hablando de una marca como Yamaha así ha sucedido.
Una todoterreno de filosofía enduro, para todo uso
La Yamaha WR125R llega con un propósito más que interesante, combinando una estética de enduro pura con la practicidad que se le exige a una moto urbana, para todo uso. Yamaha la ha definido como la puerta de entrada a la aventura dentro de su catálogo, y la alternativa perfecta para quienes buscan una moto ligera, manejable y apta tanto para el campo como para la ciudad.
Con su asiento a 875 mm de altura y un conjunto de 138 kg, se nota está diseñada para permitir una conducción de pie y facilitar el control en pistas rotas. Su chasis de acero y la suspensión delantera de horquilla telescópica de 41 mm con 215 mm de recorrido le permiten desenvolverse con garantías en caminos complicados, mientras que las ruedas de 21 pulgadas delante y 18 detrás, equipadas con neumáticos de taco Dunlop D605, rematan una configuración puramente off-road.
| Yamaha WR125R | Parte ciclo |
|---|---|
| Suspensión delantera | Horquilla telescópica de Ø 41 mm |
| Recorrido suspensión delantera | 215 mm |
| Suspensión trasera | Tipo eslabón, brazo oscilante |
| Recorrido suspensión trasera | 187 mm |
| Frenos delanteros | Disco hidráulico Ø 267 mm |
| Frenos traseros | Disco hidráulico Ø 220 mm |
| Neumático delantero | 2,75-21 45P (con cámara) |
| Neumático trasero | 4,10-18 59P (con cámara) |
La parte ciclo propone doble disco de freno (267 mm delante y 220 mm detrás) y ABS sólo en el eje delantero. No hay modos de conducción ni ayudas electrónicas: Yamaha ha querido mantener la sencillez ante todo.
Un motor de bajo mantenimiento y bajo consumo
El propulsor monocilíndrico de 125 cc, refrigerado por líquido, y con distribución variable SOHC de 4 válvulas, desarrolla 10,7 kW (14,5 CV) a 10.000 rpm y un par máximo de 11,3 Nm a 6.500 rpm. Se asocia a una transmisión de seis marchas y un embrague húmedo multidisco.
El consumo medio declarado es de 2,3 l/100 km, una cifra que, junto a su depósito de 8,1 litros, le otorga una autonomía cercana a los 350 km.
| Yamaha WR125R | Motor |
|---|---|
| Motor | Monocilíndrico, 4 tiempos, SOHC, 4 válvulas |
| Cilindrada | 125 cc |
| Potencia máxima | 10,7 kW (14,5 CV) a 10.000 rpm |
| Par máximo | 11,3 Nm a 6.500 rpm |
| Diámetro x carrera | 52,0 x 58,7 mm |
| Refrigeración | Líquida |
| Alimentación | Inyección electrónica |
| Arranque | Eléctrico |
| Embrague | Multidisco en baño de aceite |
| Cambio | 6 velocidades |
| Consumo | 2,3 l/100 km |
| Emisiones CO2 | 55 g/km |
Yamaha ha pensado en los detalles: el filtro de aire de fácil acceso facilita el mantenimiento en entornos de polvo o barro.
Una aventurera diferente por 4.699 euros
En un mercado inundado de alternativas procedentes de China, la Yamaha WR125R se desmarca como una japonesa pura, para el que busque una moto versátil para los 125 centímetros cúbicos, para el día a día, y para alguna ruta fuera del asfalto.
Disponible por 4.699 euros en el llamativo azul Icon y el negro Yamaha, no es la mayor de las gangas, pero sí una opción interesante y de marca partiendo por debajo de los 5.000 euros, que precisamente por el peso de la marca y su encanto enduro puede incluso competir con propuestas trail más económicas de 125.









