El TVR Tuscan siempre ha representado la radicalidad de este peculiar fabricante británico. Ahora mismo se encuentra en el limbo, pero se espera que la marca sea relanzada a lo largo de los próximos dos años. El Tuscan de los años 60 no era como los otros deportivos británicos de la época. Donde los MG B y los Austin Healey llevaban pequeños motores que no solían superar los 100 CV, el Tuscan adoptaba su ligereza y forma general, pero lanzaba al capó un enorme 4.7 V8 de origen Ford.
Era una especie de muscle car británico, con 270 CV, pero la ligereza de sus rivales. Un toque de esquizofrenia para un coche que pocos se atrevían a llevar rápido. Como datos de referencia, el coche pesaba 1.030 kg, aceleraba de 0 a 100 km/h en 5 segundos largos y alcanzaba los 250 km/h. En estos tiempos sigue siendo igual de radical, pero algunos pueden pensar que no lo suficiente. Es el caso del preparador Classic World Racing, que ha decidido acoplarle en el vano motor la bestia que impulsa a los Corvette.
El Classic World Racing TVR Titan llevará un 6.2 V8 LS3 potenciado hasta los 480 CV, que manda toda la potencia al tren trasero a través de una caja de cambios manual de cinco relaciones y un autoblocante de altas prestaciones. No había mencionado que este TVR Tuscan moderno no es el original, sino una reproducción muy fidedigna, algo así como los Cobra de Superperformance. Fue lanzada en marzo una versión de competición, y ahora es cuando se lanzará una versión de calle, por un precio que rondará los 48.000€.
No sabemos de sus prestaciones, pero por los neumáticos que lleva y sabiendo que pesa 980 kg podemos esperar que se coma a los Porsche para merendar. Y no podemos olvidarnos de un aspecto arrebatador, todo un clásico de líneas que evoca a épocas más sencillas.
Classic World Racing juega con un TVR Tuscan del año 1968
Vía: Autoblog.it
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