Tesla Roadster, Fisker Karma y compañía están sentando las bases de la deportividad en modo “ecológico”. Hace unos años podría decirse que era el futuro, ahora podemos decir que es un futuro que está al caer. La mayor aceptación de que un coche eléctrico puede ser deportivo hace que otras marcas, la mayoría de corte artesanal, salgan a la palestra para intentar conseguir su hueco del pastel.
Ahí está Exagon Motors, una empresa muy joven proveniente de Francia, con su Furtive EGT para enseñarnos otra forma de ver un superdeportivo “a electrones”. Es un coupé de cuatro plazas, en formato 2+2 como no podía ser menos, con un estilo muy similar al del Lotus Elite. Luces LED, llantas muy atrevidas y un frontal muy puntiagudo definen su aerodinámico exterior. Por dentro reina la sencillez, quizás demasiada para un coche como éste y llaman la atención los asientos deportivos tan envolventes.
Tendría una velocidad punta de unos 250 Km/h, autolimitada electrónicamente, y rompería la barrera de los 100 Km/h en 3.5 segundos saliendo desde parado. Para conseguir estas cifras se nutriría de los 340 CV de potencia que serían capaces de entregar en conjunto, al menos teóricamente, los dos motores de 170 CV con los que va equipado. Dependiendo del uso que se le diera podríamos estar hablando de una autonomía de 400 Km. Más o menos los mismos números que nuestro querido Tesla Roadster.
En teoría su producción comenzará en el año 2012 pero antes de eso ya lo podremos contemplar en el Salón de París que arranca esta semana. El mercado de los superdeportivos eléctricos es un punto de partida hacia la evolución debido a que sus compradores no adquieren solamente un coche impensable para el común de los mortales sino que también “financian” la investigación y desarrollo en este campo.
Exagon Furtive eGT
Vía: Autoblog.nl
En Diariomotor: Tesla Roadster 2011 2.5, nueva evolución para el deportivo eléctrico | Fisker Karma
