Audi descarta A1 y A2 e-tron y se centra en un A3 híbrido

En Ingolstadt siguen sin ver del todo claro el sentido y el futuro del vehículo eléctrico. Audi sigue apostando por el eléctrico pero de momento parece que sin el convencimiento de que esta sea una alternativa viable a corto o medio plazo. Sin ir más lejos esperábamos que tanto el Audi A1 e-tron como un hipotético Audi A2 e-tron posicionado como monovolumen del segmento B, se aprovechasen de una mecánica eléctrica para entrar en el negocio de esta clase de utilitarios urbanos en los que sus competidores, y más concretamente BMW, ya están trabajando.

Todo apunta a que un producto con esta tecnología y lo que ello implica – baterías, localización del sistema eléctrico, ingeniería para compensar el peso añadido – tendría que comercializarse por no menos de 40.000€, al menos manteniendo un estándar de calidad óptimo. Incluso con la ayuda de las subvenciones existentes en cada país europeo, la ecuación sigue concretándose en un resultado negativo que contrasta con los intereses de Audi.

Así las cosas y según publicaba CAR Magazine de acuerdo con la información obtenida de un responsable de Audi, tanto el A1 e-tron como el A2 e-tron habrían sido descartados de momento.

Audi A2 e-tron

Para ser más concretos el Audi A1 e-tron no es un eléctrico puro sino un eléctrico de autonomía extendida, o en otras palabras, cuenta con un pequeño motor de combustión pensado para recargar las baterías cuando estas se agoten. Para ello se empleaba un motor rotativo de tipo Wankel. Esta opción también habría sido descartada por ser inviable por su alto coste.

Nada sabemos acerca del Audi A3 e-tron, la versión eléctrica del popular compacto que acaba de renovarse aunque de momento sólo con motores de combustión. Si su lanzamiento se produce antes tendrá que pasar por un periodo de gracia o transición en el que sí que se comercializará con una mecánica híbrida enchufable. Más concretamente este Plug-In Hybrid llegará a los concesionarios en 2013, con casi todas las ventajas de un eléctrico por ser capaz de moverse durante bastantes kilómetros sin necesidad de entrar en funcionamiento el motor de combustión y sin muchos de los inconvenientes respecto a los motores térmicos que se achacan a los vehículos eléctricos.