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Ferrari parece, pero no lo es: detenidos en Ferrol por la venta de una réplica del Ferrari F50, con motor VR6 y 260 CV

Lo que ves más arriba es un Ferrari F50. El de las imágenes que verás a continuación, no. El negocio de la producción de réplicas no es nuevo, ni mucho menos. Tampoco lo es la creación de réplicas de Ferrari. Sin ir más lejos, hay modelos que, por su configuración, se han convertido en la base perfecta de homenajes, o falsificaciones – llámalo como quieras – que intentan asemejarse un deportivo de renombre. Generalmente se trata de réplicas que lógicamente no engañan a nadie, como los famosos 360 Modena basados en el Peugeot 406 Coupé o en el Toyota MR2. En cualquier caso, que no haya engaño, no impide que exista el delito contra la propiedad industrial. Eso fue lo que llevó precisamente a que la Guardia Civil haya detenido a dos personas por poner a la venta un falso Ferrari F50.

Se trataría de una réplica, con un motor VR6 en posición central y 260 CV.

Eso es lo que habría sucedido en este caso. Según La Voz de Galicia, la Guardia Civil se encontró con un anuncio en internet de lo que se promocionaba como una «réplica de Ferrari F50», con motor central, tracción trasera, motor VR6, y muy parecida al modelo real. El coche – cuyo modelo en cuestión desconocemos – es de 2009, tiene 48.000 kilómetros y 260 CV de potencia. La base la desconocemos, pero imaginamos que el motor lo heredó de un Volkswagen Golf R32. Se anunciaba por 24.000€.

Recordemos que en 2013 ya fueron detenidos los responsables de dos talleres que se dedicaban a fabricar réplicas de Ferrari.

Tanto el propietario, como el gerente del concesionario en el que se ofertaba, han sido detenidos.

Tras encontrarse con el anuncio, la Guardia Civil inició sus pesquisas, y contactó con los representantes de Ferrari en España. Fueron estos, los que al trasladarse para contemplar el coche y percatarse de que era una réplica, interpusieron una denuncia por delito contra la propiedad industrial.

Como resultado de la operación llevada a cabo por la Guardia Civil habría sido detenido su propietario, y el gerente del concesionario en el que se encontraba, en el área de la ría de Ferrol.

Según las primeras investigaciones, todo apunta a que este coche habría sido fabricado en Polonia, para más tarde haber sido trasladado hasta España. Mientras tanto, esta réplica reposa ya en el depósito de la Guardia Civil de A Coruña.

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