Durante la temporada 2019, cuando fue ascendido desde Toro Rosso hasta Red Bull Racing para reemplazar a Pierre Gasly, el piloto Álex Albon manifestó que el segundo Red Bull es un monoplaza muy complejo para novatos porque está diseñado para ser competitivos y sensible, a diferencia de los coches que se construyen en Faenza cuyo concepto está orientado a ser fáciles de maniobrar, lo que facilita el proceso de adaptación para novatos y también concede confianza a pilotos que no tienen la presión de ganar. En aquella ocasión, Albon comparó su RB15 con un ratón de PC que responde al mínimo estímulo, razón por la cual cometió tantos errores.
Ahora, instalado en Williams Racing y con una sólida reputación a cuestas, el piloto tailandés reitera que su conclusión realizada hace años fue correcta puesto que Yuki Tsunoda no ha podido descifrar su RB21 y Liam Lawson perdió el asiento casi de inmediato. Solamente un veterano como Sergio Pérez, para entonces con diez temporadas en la Fórmula 1, pudo lograr buenos resultados con el segundo Red Bull, lo que obviamente lleva a pensar que ese puesto no es para novatos y, aunque Tsunoda tiene experiencia de cinco temporadas, es la primera vez que el japonés sale de Racing Bulls y no luce nada cómodo.
En tal sentido, Albon recuerda con cierta nostalgia como su pasantía por Red Bull Racing al lado de Max Verstappen casi acaba con su carrera. Y es que todos apreciaron cómo no podía dominar un monoplaza que en teoría era capaz de ganar carreras o al menos confrontar a los Mercedes y apenas pudo alcanzar dos podios. Pero su regreso a la Fórmula 1, tras una pausa de dos años, y la experiencia que ha acumulado en este período con Williams le llevan a reflexionar acerca de lo que sucedió. También observa cómo Pierre Gasly logró establecerse en la parrilla, inclusive ganó el Gran Premio de Italia 2020 con un AlphaTauri, así que el segundo Red Bull es un gran reto para el talento y las capacidades del piloto.
En cuanto a las razones por la que el Red Bull se adapta a Max Verstappen, Albon cree que el actual campeón disfruta de una configuración sensible hasta el límite, una condición que es natural en él, mientras el resto debe entrenar hasta agudizar los sentidos al punto de poder comprender a un monoplaza tan particular. En tal sentido, Isack Hadjar ha declarado que no se siente listo para irse a Red Bull Racing, aunque la propuesta sea el objetivo principal cuando se ingresa al programa de pilotos dirigido por Helmut Marko.
En palabras de Álex Albon:
Creo que el coche está al límite y solo Max [Verstappen] puede llevarlo. Obviamente, puedo hablar por experiencia. Tuve dificultades. Creo que con la experiencia que tengo ahora podría superarlo. Pero no es algo que la mayoría de los pilotos encuentren natural. Creo que eso es lo que estamos viendo ahora. Los cimientos del equipo se basan en pilotos jóvenes y el Red Bull es casi el extremo. Pasas de un coche indulgente a uno complejo, así que tienes que adaptarte rápido a dos coches muy diferentes.
Vía Motorsportweek
