Nuevo episodio desigual para la pareja de pilotos españoles en el Gran Premio de los Estados Unidos, en contraste con sus respectivos sábados. Fernando Alonso sumó el punto final después de una carrera más bien anónima, donde el de Aston Martin no pudo atacar a sus rivales delanteros y tampoco padeció para mantener a quienes venían por atrás. Carlos Sainz empezó con un buen resultado en la Sprint pero cualquier esperanza dominical se desvaneció a las siete vueltas de carrera por una colisión con Andrea Kimi Antonelli en un ataque optimista del Williams.
Max Verstappen arrancó muy bien y Charles Leclerc adelantó a Lando Norris por la segunda plaza. Oscar Piastri atacó con éxito a George Russell y la parte alta se comprimía más allá de un veloz Verstappen que no tardó en fugarse. Sainz se mantuvo en los primeros metros y superó a Oliver Bearman en la segunda vuelta mientras Alonso perdía posición con Yuki Tsunoda y Nico Hülkenberg, yendo al japonés a por Bearman y Sainz en la parte final del top 10.
Sainz demostró ritmo en el principio y se fue a por los Mercedes pero cuando alcanzó a Antonelli se tiró en la curva 15 de forma optimista. Ambos chocaron y el español dañó su rueda delantera derecha, retirándose en la escapatoria interior de las dos últimas curvas. Antonelli regresó sin mayores consecuencias y Dirección de Carrera estableció el Virtual Safety Car durante un par de vueltas.
El toque entre los dos hizo que Alonso ascendiese hacia la zona de puntos en una carrera tranquila donde las distancias eran amplias. El asturiano quedaba a cuatro segundos de Hülkenberg y le sacaba otros cuatro a Liam Lawson y Pierre Gasly mientras por arriba Norris y Leclerc tenían su propia pelea por el segundo puesto con ventaja para el inglés después de 20 giros de resistencia del Ferrari. Leclerc había salido con blandos y abrió la ventana de paradas en la vuelta 23.
Bearman, Alonso y Lawson pararon a la vez en la vuelta 30, quitándose todos ellos los Pirelli medios para instalar los blandos. Hülkenberg entró en la 34 y regresó con margen sobre el español, que además debía ir a por un Alex Albon que salió en la cola y realizó su primera detención bajo el VSC de Sainz y Antonelli. Sin embargo el tailandés se apartó a mitad de carrera y Alonso recuperó el décimo lugar.
Un incidente entre Tsunoda y Bearman relegó al piloto de Haas y permitió a Alonso y compañía recortar distancias, aunque los diez segundos de diferencia con el Aston Martin parecían demasiado. Lawson y Lance Stroll alcanzaron al bicampeón pero no pudieron atacarle con garantías y Alonso se distanció para llevarse el último punto del Gran Premio, que le dejó con buenas sensaciones ante la prensa.
No recordaré esta carrera en mi memoria, hemos salido y acabado décimos y no ha pasado gran cosa ni delante ni detrás de nosotros. Hemos sido lentos, teníamos que hacer 23 vueltas con el neumático blando y nunca habíamos hecho tanto. Lawson iba cerca y conservé gomas durante quince vueltas, después me distancié en las últimas cinco por si llegaba Antonelli. Teniendo en cuenta que los cuatro equipos punteros están lejos, Williams va cerca, Bearman y los Sauber están delante… he puntuado con el noveno coche de la parrilla, así que en ese sentido estoy contento.
Sainz sufrió un domingo para olvidar después de un fin de semana medianamente prometedor y considera que la sanción puede ser repartida. Los puntos de la Sprint (donde finalizó tercero) le colocan a la puertas del top 10 del Mundial de Pilotos, objetivo asumible con un coche que sigue en una cómoda quinta posición en el apartado de Constructores.
Una pena este resultado, venía muy rápido y podría haber seguido a los Mercedes. He adelantado a Bearman en la misma zona donde lo he intentado con Antonelli y me ha sorprendido. Creo que no me ha visto, se ha ido cerrando poco a poco y cuando ha cerrado la puerta del todo ya no tenía donde meterme. Parece un choque feo desde fuera y acepto el hecho de bloquear el neumático pero creo que puede ser culpa de ambos porque Bearman no se ha cerrado de la misma manera.
