Williams tenía marcado este fin de semana en Las Vegas como una de las citas en las que el FW47 podría lograr grandes cosas. Sin embargo, el cambio de condiciones a mojado ya desde los terceros entrenamientos libres creó ese marco de incertidumbre que obligó a la escudería a hacer los cambios correctos de cara a la sesión clasificatoria. En ese punto se vieron prácticamente dos realidades; la de Alex Albon pegándose con el coche y sufriendo para mantenerlo recto hasta tal punto que, en uno de los coletazos en aceleración, terminó yéndose al muro, y la segunda realidad, la de un Carlos Sainz estelar que hizo del neumático de lluvia extrema su perfecto aliado.
El madrileño fue contundente en cada una de sus vueltas. Cada vez que el dorsal #55 pasaba por línea de meta, el nombre de Carlos Sainz se ponía a comandar la tabla de tiempos, lo que significaba que estaba en condiciones de pelear incluso por las primeras líneas de parrilla de mantenerse ese nivel de pista mojada. Sin embargo, con el paso de los minutos y de los coches, el asfalto comenzó a secarse y la vuelta de Lance Stroll con intermedios al final de la Q2 ya fue el indicativo de que tocaría luchar por la Pole Position con los Pirelli de letras verdes.
El coche la verdad que en mojado me gusta mucho. Lo llevo con confianza y hoy se ha notado. Sí, estoy contento con el equipo, con mi pilotaje. Esta segunda mitad de temporada está siendo buena, a pesar de un par de malos resultados, pero estoy contento y mañana hay que intentar rematar la faena – Carlos Sainz
Incluso en esas condiciones, Carlos Sainz volvió a ser competitivo, cerrando cada una de sus vueltas en tiempos de referencia y quedándose a un suspiro incluso de meterse en primera fila con su buen amigo y excompañero de equipo, Lando Norris. Sin embargo, como él mismo reconoció, ser uno de los primeros en completar su definitivo giro le pasó factura frente al británico y Max Verstappen, por lo que finalmente partirá desde la tercera posición de parrilla, sabiendo que detrás tendrá a George Russell (finalmente sin sanción Mercedes-AMG F1) y Oscar Piastri, los cuales pueden ser unos compañeros de baile difíciles de contener en carrera.
Habrá que estar muy atentos especialmente a la configuración, ya que hay pilotos como Charles Leclerc que ya han confirmado que han optado por un set-up claramente de mojado que le puede haber ayudado ligeramente este sábado, pero que, ante una carrera en condiciones de seco, puede llevarle a sufrir con el paso de las vueltas y la posible aparición del graining en el neumático. En el caso de Carlos, llegó a soñar con la Pole tras ese último intento, una situación que antes de Bakú parecía muy complicado de ver debido a esa primera mitad de año tan complicada que ha vivido el piloto de Williams.
Bien, al final la verdad que ha sido una qualy muy complicada. No esperaba grandes cosas porque los libres 3 en mojado, al principio de la sesión, no hemos sido muy rápido. Pero hemos hecho un par de cambios y al final desde la primera vuelta que hemos puesto el extremo, cada vez que cruzaba la meta estaba en primera posición. Y eso me ha dado mucha confianza; una pena que el circuito no se haya quedado en extremo, porque es cuando más rápido íbamos. Y luego nada, la última vuelta de Q3 la verdad que es muy buena vuelta, lo mejor que lo podía hacer, sin errores. Creía que era pole. Sinceramente. Luego me he dado cuenta que he sido el primero en cruzarla y que todavía quedaban estos dos por llegar, que normalmente en condiciones normales te tienen que batir. Así que muy contento, muy, muy feliz de hoy – Carlos Sainz
Quedará por ver todavía la decisión que toman los comisarios sobre un rejoin inseguro que ha realizado Carlos en la primera parte de la clasificación, algo que él mismo explicaba antes de ir a la reunión para dar su versión de los hechos:
Al final no sé cómo describirlo, pero en la Q1 no veíamos nada; perdí el coche en la curva 5, intentando… sabiendo que estaba generando una bandera amarilla. He intentado quitar la bandera amarilla lo antes posible. Sabía que todos los que venían detrás mío no podían empujar en la 5 porque venían en bandera amarilla por mi culpa, y lo único que estaba intentando es quitar la bandera amarilla lo antes posible. Así que nada, a ver qué pasa, pero no creo que pase nada – Carlos Sainz
