El pasado fin de semana, cuando la IndyCar se disputó en el circuito de Detroit, al novato Louis Foster se le partió la suspensión delantera derecha mientras se desplazaba a casi 300 km/h, una barra se desprendió de su soporte y se movió hacia adentro lo que provocó una inevitable pérdida de control. Intentando maniobrar, Foster se llevó por delante a Felix Rosenqvist, un aparatoso choque que dejó al piloto de Meyer Shank Racing con leves lesiones en las rodillas. Una vez inspeccionado el chasis de RLL, desde Dallara emitieron un comunicado donde se indica que el personal del equipo de Bobby Rahal no ajustó de manera óptima el brazo al soporte de montaje delantero.
El chasis siniestrado de Foster es el segundo que desecha RLL en corto tiempo tras lo ocurrido con el primer monoplaza asignado a Takuma Sato para las 500 Millas de Indianápolis. En tanto el chasis de Rosenqvist, aunque resultó dañado en Detroit es reparable, previo desembolso de unos 250 mil dólares. Según se explicó, los soportes se instalan en el interior del chasis DW12 y se fijan mediante tuercas K de captura soldada y en el caso de Foster se determinó que la tuerca K se desprendió del soporte inferior del brazo A, lo que provocó que el soporte exterior se desprendiera causando el colapso de la suspensión. En tal sentido, es responsabilidad de los mecánicos de cada equipo instalar las barras de la suspensión y realizar los ajustes, entre ellos la fijación con pernos, así que el personal de Dallara no tiene responsabilidad en el incidente.
Pero, de igual manera, desde Dallara realizaron un llamado de atención a los equipos para que procedieran a reemplazar soportes internos de suspensión si observan desgaste e inclusive se está exigiendo mayor rigidez en la inspección técnica para evitar que se reutilicen piezas agrietadas. El ajuste de la suspensión suele ser una tarea compleja debido a que es el ingeniero de carrera quien autoriza los cambios y los mecánicos procedes a retirar los dos pernos de los soportes exteriores del brazo A para mover el ángulo de la barra y una vez determinado el nuevo reglaje, volver a reinstalar los pernos al soporte del brazo que permanece anclado al chasis. Esta forma de operar, modificando la parte exterior, es la más eficiente puesto que realizar el mismo trabajo, pero trabajando desde el interior, llevaría demasiado tiempo puesto que se debe retirar los paneles de la carrocería para acceder a las tuercas y arandelas de cada perno.
Vía RACER
