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Gran Premio de Canadá 1976: James Hunt, a la caza del título

La temporada de 1976 de Fórmula 1 es una de esas que generan afición. Un duelo entre dos pilotos con mentalidades y formas de trabajo distintas, dos equipos en la zona alta peleando por el título combinados con la presencia de varias estructuras de menor calibre que lograban mezclarse en la lucha por la victoria ocasionalmente, un grave accidente de un Niki Lauda que era el campeón en título, una recuperación milagrosa… y solo dos carreras perdidas. James Hunt, que estaba por detrás en la clasificación general, lo tenía ahora todo de cara para recortar la ventaja de su rival, pero aún tenía todo el trabajo por hacer cuando el mundial llegó a Canadá para la antepenúltima carrera del año. Fue una carrera en la que James Hunt volvió a demostrar cuánto quería el título de campeón, además de cuán capaz era de lograrlo.

Cuando la Fórmula 1 salió de Italia para dirigirse a Canadá, Lauda había efectuado ya su milagroso retorno a la competición y gracias al cuarto puesto a tan solo diecisiete segundos de su compañero de equipo y menos de veinte del ganador, el austriaco contaba con cinco puntos de ventaja. Había vuelto a la acción antes de perder el liderato y en Monza lo había incluso ampliado, aunque fuera por tres puntos. Tras ellos, Jody Scheckter era tercero en la general y para vencer el título habría necesidado un milagro. Era el único piloto que optaba al título más allá de Hunt y Lauda. El Gran Premio de Canadá de 1976 se disputó en el circuito de Mosport Park, por penúltima vez en la apasionante historia automovilística canadiense que había vivido episodios importantes en el pasado.

La primera noticia del fin de semana era la sorpresa de la descalificación de Hunt del Gran Premio de Gran Bretaña. Se consideraba que el equipo McLaren no actuó correctamente con respecto a su piloto, puesto que este tomó parte en la segunda salida tras reparar el coche dañado en la primera, cuando este no había vuelto a boxes por su propio pie. Al no haber completado la primera vuelta, se consideraba nula la disputa de la carrera, perdiendo Hunt nueve puntos y ganando Lauda tres al convertirse el de Ferrari en el ganador de la carrera. De esta forma, la situación estaba aún más controlada que antes por el campeón en título… o por lo menos, eso parecía. Aunque había que tener en cuenta que su rendimiento no volvería a estar en su sitio en tan pocas semanas, lo que le daba opciones al de McLaren.

Quizás espoleado por la decisión de McLaren de olvidarse del aún problemático M26 para alargar el desarrollo del veterano pero fiable M23, Hunt no quiso desaprovechar estas opciones que las circunstancias le daban y en Mosport, el británico firmó la pole position con casi cuatro décimas de ventaja sobre Ronnie Peterson. Por detrás, Vittorio Bambilla confirmaba el buen rendimiento del March como el de Peterson, con Patrick Depailler cuarto en el primer Tyrrell. Niki Lauda era sexto justo detrás de Mario Andretti. En carrera no estarían ni Harald Ertl ni Chris Amon, tras un accidente sufrido en los entrenamientos que dejó leves lesiones para ambos, impidiendo que estuvieran listos el domingo. El neozelandés se había retirado de la competición en activo tras el Gran Premio de Alemania y había vuelto para lo que sería solo una carrera con el equipo de Walter Wolf… no pudo ser, y la carrera del desafortunado más afortunado del mundo acabó de esa forma tan suya.

En la carrera, Peterson realizó la mejor salida y se situó en cabeza, por delante de Hunt. Por detrás, Depailler se situaba en tercera posición después de hacer lo mismo que el sueco volador y superar a Brambilla, que pronto era superado por Mario Andretti. Al cabo de relativamente poco, también Jody Scheckter le superó, algo que replicó Niki Lauda en la novena vuelta. Por delante, en el mismo giro, Hunt se situó en cabeza, tomando una posición de comando que no soltó a lo largo de toda la tarde. Tras el británico, Peterson empezó a perder posiciones poco a poco hasta acabar fuera de los puntos, noveno. Mientras tanto, llegaba el primero de los pocos abandonos del día con la salida de pista de Merzario en la undécima vuelta. Le siguió Hans Joachim Stuck en la vuelta 36 con problemas de manejo, Emerson Fittipaldi con un escape dañado y Jacques Laffite, sufriendo por la presión de aceite de su motor Matra. Sería el último abandono del día, sucedido en la vuelta 43.

En las posiciones delanteras, todo se mantenía igual aunque Lauda tuvo que ceder su buen puesto en los puntos con problemas dde manejo parecidos a los sufridos por Stuck. Lauda se vio obligado a dejar pasar a Jochen Mass, Clay Regazzoni y Carlos Pace en la vuelta 49, cayendo a la octava posición que mantuvo hasta el final. En cabeza, James Hunt seguía a su ritmo, sin ninguna molestia de sus rivales. La carrera terminó sin mayores sobresaltos, con un James Hunt que recuperaba de esta forma los puntos perdidos en el Gran Premio de Gran Bretaña, El piloto de McLaren logró gracias a su tesón mantener las opciones abiertas. Curiosamente, el resultado dio tres puntos a un Niki Lauda que no finalizó entre los seis primeras en la carrera y que aún así, caprichos del destino, salió del fin de semana con más puntos de ventaja de los que tenía cuando empezó el mismo.

Tras Hunt, la segunda posición fue para un excelente Patrick Depailler que logró un buen resultado a bordo del primero de los Tyrrell P34 de seis ruedas. Otro podio más para el coche más revolucionario de la temporada, que logró imponerse en manos del francés a la ya leyenda norteamericana Mario Andretti, al volante de un Lotus, completando el ‘cajón’. La cuarta posición fue para Scheckter, con Mass quinto en el segundo McLaren y Regazzoni sexto en el Ferrari. Lauda solo podía ser octavo, a más de un minuto del vencedor esta vez y lejos de Regazzoni o de Carlos Pace, que llegó junto al suizo a la meta. Por lo menos, Lauda había terminado en la vuelta del líder. Apenas una cuestión de orgullo, pero una cuestión importante a falta de tan solo dos carreras.

En cuanto al campeonato, a falta de dos carreras para el final la diferencia entre Lauda y Hunt había aumentado hasta los ocho puntos, mientras Scheckter se quedaba a 21. De esta forma, el surafricano quedaba fuera de contención y el campeonato se convertía en cosa de dos. Por otra parte, Ferrari tenía un título de constructores prácticamente confirmado. En Estados Unidos, tanto Lauda como Ferrari podían convertirse en campeones. El primero no lo logró, tras ser tercero tras un victorioso Hunt. Pero en Ferrari, sí confirmaron el que acabaría siendo el trofeo de consolación de la temporada de 1976. La última carrera, en Fuji, prometía emociones espectaculares. algo que se cumplió tanto los pilotos y equipos como sobre todo pol clima, con la lluvia torrencial que decidiría el desenlace….

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