ESPACIOS
Cerrar CERRAR
Competición

11 MIN

WRC Generations: el último videojuego de la saga se despide con su entrega más redonda

Será el año de la despedida. WRC Generations marca la última edición del videojuego oficial del Campeonato del Mundo de Rallyes bajo la batuta de Kylotonn Games, desarrolladora francesa que se ha estado encargando del título desde WRC5, el mismo que representaba a la temporada 2015. A partir de ahí, la serie numérica ha seguido prácticamente imparable con el avance de las campañas del Mundial y ahora ha llegado el turno de dejar su testigo a un nuevo proyecto.

Antes de que se produzca el relevo, WRC Generations pretende ser el título más redondo y completo de la saga, aprovechando para además dejarnos tantear la nueva generación de coches híbridos por primera vez presentes en un juego. Disponible para Xbox Series X y Series S, PlayStation 4, Xbox One, PlayStation 5 y PC (contará por primera vez con Crossplay), la fecha de estreno oficial será el próximo 3 de noviembre, día que lo podrás encontrar en las tiendas tanto en formato físico como en plataformas digitales, pero nosotros ya hemos podido darle un primer vistazo antes de su lanzamiento gracias a Nacon.

Modos de juego en WRC Generations:

Como viene siendo habitual, nos ofrece de nuevo la posibilidad de disputar temporadas con los equipos oficiales y los coches del Mundial de Rallyes, hacer partida rápida, ahondar en el modo multijugador (incluido el nuevo modo Ligas), hacer nuestro propio modo carrera offline, enfrentarnos a distintos desafíos de conducción o enfrentarnos al modo copiloto. Este último fue una de los añadidos más curiosos de las anteriores entregas y repite en este WRC Generations con un sistema todavía más pulido que el que vimos en las dos entregas anteriores.

Este último obliga a un piloto y a un copiloto a ponerse al volante y a las notas, e interactuar entre sí para completar los tramos. Aquí la función más atípica es la que tiene el que se sienta en el asiento de la derecha virtual, ya que además de estar pendiente de los Quick Time Events que aparecen en pantalla para poder marcar el tempo de las indicaciones, también deberá comunicarse a través del micrófono con el piloto para cantarle hacia dónde va cada una de las curvas.

Evidentemente es el modo campaña el que seguramente atraiga más la atención de todos aquellos que decidan jugar al título (‘Temporada’ elimina la parte de gestión del equipo y de recursos), especialmente disfrutando de esa posibilidad que siempre da el WRC de enfrentarte a distintos terrenos y condiciones, con pruebas tan distintas como el Rally de Croacia o el Catalunya, el Safari respecto a Finlandia o los técnicos tramos de Portugal y Acrópolis. Cada uno tiene su propia esencia, aunque es cierto que se agradecería más novedades respecto a otros años en cada una de las pruebas y que, por ejemplo, el RallyRACC en lugar de revisitar la superespecial de Montjuïc, se pudiera competir en el tramo urbano de Salou.

En el modo partida rápida podrás encontrar como extras pruebas que no se encuentran actualmente en el calendario del WRC 2022, entre ellas Argentina, Chile, Alemania, México, San Remo, Córcega, Turquía y Gales, por lo que la variedad esta asegurada. Se echa de menos ese guiño a la historia del Mundial realizado en WRC 10, con aquel Modo historia que nos llevó a revivir algunas de las mayores hazañas deportivas en el campeonato, desde los Grupo 4 hasta los WRC de nueva generación, pasando por los monstruosos Grupo B y los espectaculares Grupo A.

En esta ocasión no está, aunque el acceso a los coches históricos y de bonificación sigue siendo muy completo. En total son 35 modelos de todas las épocas, contando en este caso los Rally1, Rally2 y Rally3, así como el Peugeot 206 WRC que algunas versiones traen como contenido descargable, todo ello para 20 localizaciones distintas y más de 150 tramos si sumamos superespeciales, tramos en una y otra dirección, especiales largas que los agrupan y los shakedowns. Una cantidad más que suficiente para dedicarle muchas horas.

Los nuevos Rally1 por primera vez disponibles:

En el apartado gráfico cumple, aunque no es un portento ni tiene pinta que haya querido serlo. Se nota la evolución estética de la saga, con un modelado de los nuevos Rally1 más que logrado que refleja claramente las diferencias respecto a los antiguos World Rally Cars de 2017. Sin embargo, es evidente que sigue adoleciendo en parte el hecho de tratarse de un título intergeneracional (de ahí su precio reducido), por lo que se nota desde fuera como una edición muy continuista en la que se logra una buena experiencia jugable en el modo rendimiento, el cual mantiene estable la tasa de frames en consolas de nueva generación sin penalizar demasiado el lado de los gráficos.

En los tramos todo luce de forma más que correcta, con muchos elementos en el entorno, con una buena representación del clima dinámico y con todos los elementos que están presentes en los rallyes. Quizás uno de los puntos que más adolecen estos y otros títulos de rallyes es la reducida capacidad de visión que siempre se muestra durante los tramos de noche. Se hace muy molesto la poca cantidad de metros que puedes ver cuando estás encarando secciones muy rápidas y llenas de trampas de pruebas como el 1.000 Lagos o el rally keniata, haciendo casi imposible en muchas ocasiones el poder evitar la colisión.

Con las fareras adicionales que montan estos coches de rallyes, especialmente las nuevas con tecnología LED, debería ser un haz de luz mucho más potente que te permitiera ver a lo lejos también en su presentación virtual, en cambio, tienes que andar jugando con el brillo para así tratar de ver algo en medio de la oscuridad. Especialmente cuando jugamos en los modos más difíciles, aquellos que te reducen o te eliminan las opciones de volver a empezar y que puede llevar a que una roca escondida o un bache que no está en las notas te lleve a arruinarte por completo tu participación en una cita.

El sistema de control más depurado de la saga:

El control con mando quizás es el que más me ha sorprendido. Por experiencia, la adaptación al manejo en volante es cuestión de tiempo, y con algo de paciencia y de ajuste de parámetros convierten la experiencia en algo muy disfrutable. En el caso del mando es donde quizás esto sea mucho más peliagudo que en un juego de carreras que se desarrolla en circuitos o de aquellos títulos que buscan ser un corte más de simulación. Con WRC Generations han conseguido finalmente unas buenas sensaciones con el mando en la mano, especialmente en PS5, donde podemos sacar partido a la presencia de los gatillos adaptativos.

Y es que se puede apreciar precisamente cómo cambia la dureza de dichos gatillos, especialmente el del freno, cuando las ruedas se bloquean o pierden agarre, así como en los momentos en los que llevamos algún tipo de problema técnico en el coche. La sensibilidad de la dirección ha sido modificada y ya no vamos dando bandazo de lado a lado de la carretera o del camino de tierra. La sensación es de mayor fluidez y disfrute, por lo que promete que aquellos a los que les costó acostumbrarse al control de los coches, tendrán en esta ocasión mejores sensaciones y se podrá ir muy rápido.

En cuanto al comportamiento de los Rally1, sí que se aprecian cambios respecto a los World Rally Cars de la anterior generación, especialmente en aceleración y en salida de curva, donde el empuje de la parte eléctrica nos lleva en más de una ocasión a hacer insinuar el eje trasero cuando salimos de las curvas y no tenemos todavía la dirección totalmente recta. Se puede cambiar entre los tres modos distintos de mapas de entrega de potencia del kit híbrido, algo que se puede hacer de forma muy sencilla antes de empezar el tramo y así adaptarnos por ejemplo a la longitud de la especial o a las condiciones de agarre que estén presentes en la misma.

Nos quedó probarlo de forma más profunda con volante y pedales, pero si se repite esa fluidez antes mencionada con el mando de PS5 y el force feedback responde a ello, será de lejos el mejor control de toda la saga.

Tips para aquellos que se adentran a la saga WRC:

Consejos para los que son completamente ajenos a la saga y se zambullen aprovechando la llegada del WRC Generations. En las primeras temporadas en el modo carrera es importante elegir iniciar por categorías inferiores aprovechando que este año tanto WRC Junior como WRC2 son de tracción total. Sin contactos previos con la saga de KT Racing (el brazo de juegos de carreras de Kylotonn), es bueno que empieces por una de las clases teloneras antes de dar el salto a la absoluta, algo que te permitirá ir conociendo el agarre de los neumáticos, la interpretación de las notas y algunos de los tramos.

El sistema de árbol de habilidades de WRC suele permitirnos ir mejorando el equipo y el coche a lo largo de la temporada, comenzando por el agarre de los neumáticos, la eficiencia del turbo o el tiempo en el que la caja de cambios sube o baja las marchas. Si tu primera temporada comienza en Monte-Carlo, es fundamental que uno de esos puntos de habilidad que te dan al inicio lo apliquéis precisamente en el agarre de los neumáticos. De no ser así, las secciones con nieve y neumático blando de seco pueden convertirse en toda una pesadilla.

Importante es que también le toméis el truco a las horquillas y al uso del freno de mano, especialmente en secciones de subida, donde la inercia no ayuda a continuar con el derrape y puedes ceder mucho tiempo. En los últimos títulos de la saga hay una especie de cambo de pruebas abierto y con distintas superficies al que puedes acceder desde la base del equipo, por lo que no dudes en perder unos cinco minutos para adaptarte a la mordida del freno de mano y a las reacciones del coche antes de ir al primer rally. Ese tiempo invertido ahí, serán menos quebraderos de cabeza más adelante.

Parte fundamental para evitar esos errores de novato, esperar a que el ‘GO!’ después del 3, 2, 1 del inicio del tramo desaparezca, ya que de no ser así te comerás una penalización de 10 segundos por adelantarte a la salida. El tiempo no comenzará a contar hasta que el coche pase por las foto-células. Como último consejo, si notáis que vais muy justos siempre en los rallyes con el desgaste de los neumáticos, acuérdate de hacer el shakedown, ya que las secciones, como en el WRC real, son muy cortas y además de permitirte tomar algo de contacto con el rally, también te darán cuatro neumáticos extra que podrás utilizar posteriormente en el rally durante una de las etapas.

¿Y ahora qué pasa con KT Racing?

Como todos sabrán, los derechos del WRC cambian de manos en el mundo de los videojuegos, por lo que este ha sido el último título oficial que sale de la desarrolladora gala. Sin embargo, KT Racing llegó hace más de un lustro para quedarse en un apartado de videojuegos que en las dos últimas generaciones de consolas parece haber dado un paso atrás. Falta variedad y títulos que arriesguen, y esto parece que en el equipo de Roman Vincent y Alain Jarniou están más que dispuestos a asumir como riesgo en una época en la que los juegos de conducción de corte árcade se han convertido en unos de los grandes incomprendidos.

Con el Test Drive Unlimited Solar Crown ya en el horno, en KT Racing ya adelantan que habrá nuevas noticias en un futuro próximo. Los creadores de V-Rally 4 y de los dos títulos de la Isla de Man – TT modernos, por el momento ya avanzan a que no será el último título con lazos directos con la disciplina de los rallyes que hagan: “No abandonaremos los juegos de rally, ¡eso es seguro! Pero aprovecharemos este nuevo capítulo para centrarnos en otros aspectos del automovilismo que son igual de interesantes”, concretó Alain Jarniou, director creativo de KT Racing.

La opinión de los pilotos:

Cargando...