Sus modelos se han convertido en coches tan trascendentales en las distintas categorías en las que militan que, ante el ununcio del lanzamiento de una denominación inédita hasta la fecha en su gama, la expectación es realmente alta.
Hablamos de Dacia, quien se encuentra ultimando los detalles de un coche que pretende poner a competir dentro del segmento de los compactos, aunque poco o nada tendrá que ver con los que conocemos, ya que gracias a unas nuevas fotos espía como las que acaba de publicar Autoevolution, sabemos que pretende ser un segmento C articulado en torno a las mismas bases que el Dacia Sandero, incluyendo su filosofía de diseño y motores.
Dacia Sandero

La fórmula Stepway funciona a Dacia y la quiere seguir explotando
Estamos ante un coche que, aunque aun no tiene un nombre oficial, lo cierto es que sabiendo que las denominaciones que últimamente ha elegido Dacia han sido nombres como Duster, Jogger, Hispter o Bigster, por su aires deportivos, familiares y formato crossover bien podría ser algo así como Sporster o Spaceter. Lo ideal, a nuestro modo de ver, sería Dacia Roomster, pero la verdad es que esta denominación se la adjudicó hace ya muchos años Skoda para un derivado del Skoda Fabia. De momento, la marca se ha referido al proyecto que sustenta su desarrollo y lanzamiento como C-Neo, ¿podría llamarse, entonces Neoster? ¿Tal vez Tourer?
Sea como fuere, lo cierto es que lo que marcará su camino comercial será las bases en torno a las que se articula. Empezando por su concepto, y tal y como revelan las fotos espía, Dacia ha tomado su propio camino al diseñar un crossover que divaga entre las formas de un coche familiar y un SUV. En cierto modo, de hecho, recuerda a los Peugeot 408 o Citroën C5X, sólo que en este caso su zaga toma formas más propias de un Touring o un Estate que una berlina.
Una altura libre al suelo pronunciada marcará la pauta en el exterior del nuevo compacto.
Por otro lado, y teniendo en cuenta que estará basado sobre la plataforma CMF-B desde la que parte la técnica de otros modelos como el Duster o Bigster, la realidad es que su gama mecánica promete ser la misma que la de estos SUV, empezando por las sencillas mecánicas microhíbridas, hasta las más completas híbridas convencionales que, en estas últimas semanas, hemos visto lanzarse también para los Duster y Bigster junto a los motores de la marca capaces de admitir GLP como combustible.
No es baladí este último dato, pues es precisamente la versión Eco-G del Dacia Sandero, que puede funcionar tanto con gasolina convenciona como con GLP, la que está acaparando nada menos que el 80 % de sus matriculaciones en lo que va de año, certificando con ello que la demanda está dispuesta a abrirse a otro tipo de fórmulas mecáncias más allá de la gasolina y el diésel convencionales.
Podemos dar por hecho la esencialidad del interior, sin dejar de lado la originalidad típica de Dacia.
Sobre lo anterior, además, también se ha de prestar atención al posicionamiento que este nuevo turismo va a tomar dentro del contexto general del mercado. Al igual que sucediera con la versión Stepway del Sandero, y como bien ha hecho la marca con el Bigster, adentrarse en un segmento haciendo uso de una base técnica teóricamente inferior a la que requida para competir ahí, puede ser toda una ventaja desde el punto de vista del precio.
Partiendo de esta base, ya sabemos que la marca es capaz de diseñar coches de unos 4,5 metros de longitud cuyo precio de partida no va más allá de los 25.000 euros, lo que da lugar a coches de tamaño superiores a lo que suelen tener los segmentos C en Europa dentro de un precio en la parte media de la tabla. Sobre esta plantemiento, y a tenor de lo visto en las fotos espía, ser un coche de carrocería familiar con toques de todoterreno, como un Sandero Stepway pero con carrocería
Todo lo anterior, por contra y por mucha lógica que pueda llegar a tener, lo cierto es que no son más que elucubraciones hechas con base en unas fotos espía y lo que sabemos del proyecto hasta ahora. Para salir de dudas no queda otra que esperar unos cuantos meses hasta que el modelo vea la luz, que definitivamente debería suceder en algún punto de 2026.





