Nadie a día de hoy duda de que el futuro del automóvil pasa por las cero emisiones de carbono, pero lo que sí está cada vez más en entredicho es la manera de llevarlo a cabo y, sobre todo, los plazos. La Unión Europea quiere prohibir los coches de combustión a partir de 2035, un plan que ahora ha criticado duramente Ola Källenius, el director general de Mercedes-Benz.
El directivo sueco, CEO del Grupo Mercedes-Benz, ha criticado el plan de la Unión Europea de prohibir los vehículos con motor de combustión a partir de 2035, uniéndose así a las voces críticas con el objetivo de la UE, que se someterá a revisión este año.
«Necesitamos una dosis de realidad. De lo contrario, nos estrellamos contra la pared», declaró Källenius al periódico económico alemán Handelsblatt.
Según Källenius, que también es el actual presidente de la Asociación Europea de Fabricantes de automóviles (ACEA), el mercado automovilístico europeo podría «colapsar» si la prohibición sigue adelante.
Pese a lo que pueda parecer, no es una postura beligerante contra el coche eléctrico sino una llamada a la cordura para no pegarse un tiro en el pie -si acaso no lo hemos hecho ya-. El director general de Mercedes asegura en la entrevista que «por supuesto que tenemos que descarbonizarnos», pero afirma que «no debemos perder de vista nuestra economía».






Por ello, Källenius aboga por una transición «tecnológicamente neutral». Aunque esta frase es algo ambigua, suponemos que se refiere a una transición más natural donde el consumidor tiene más posibilidad de elección entre varias tecnologías. No obstante, Källenius ha pedido más incentivos fiscales (recordemos que Alemania retiró las ayudas a los eléctricos a finales de 2023) y precios más asequibles en las estaciones públicas de recarga para fomentar el cambio a coches eléctricos.
La propia Mercedes está apostando fuerte por el coche eléctrico y el mejor ejemplo es el nuevo CLA, con casi 800 km de autonomía y un precio en torno a 55.000 euros. Supone un cambio de paradigma, pues es su eléctrico más asequible pero tiene casi tanta autonomía como el EQS. Pero precisamente el CLA también se ofrecerá con versiones microhíbridas porque así lo demanda el mercado.
Coches como el CLA microhíbrido, con un motor de gasolina ultra eficiente con hibridación de 48 voltios, no tendrán cabida a partir de 2035. A partir de esa fecha, la UE no permitirá que se matriculen coches nuevos que tengan emisiones de CO2. O dicho de otra forma: solamente se podrán vender coches cero emisiones.
Sin embargo, esta medida se revisará en la segunda mitad de 2025, a la vuelta del verano, para decidir si se suaviza, se elimina (esto parece poco probable) o se mantiene como está. Los más críticos creen que perjudicará notablemente a los fabricantes de automóviles europeos, que ya se enfrentan a una demanda débil y a la cada vez mayor competencia china.
Fotos del Mercedes CLA eléctrico





