Si acabas de sacarte el carnet A1 o quieres dejar tu coche en casa disfrutando cada día de conducir una moto de 125, deberías saber que Honda acaba de suspender de un modo total a su nueva CB125R. Sigue leyendo y entérate de qué le pasa a esta moto naked de estilo café racer modernista que quiere ponérselo duro a la KTM 125 Duke y la Kawasaki Z125.
Pocas sensaciones de conducción se pueden comparar a la primera vez que te montas en una moto con marchas. La sorpresa y el miedo de sentir entre las piernas el peso e inclinación de una máquina, el excitante chasquido de la marcha al engranarse y la nerviosa felicidad de abrir gas y empezar a moverte para descubrir que en un abrir y cerrar de ojos eres dueño de una pequeña maravilla capaz de hacer que la próxima curva no sea un molesto mareo sino una ocasión de pintarte la sonrisa en la cara.
Honda se arriesga con un nuevo motor…
En 2017 la casa del ala dorada completaba su nueva y atractiva gama Neo Sports Café con el lanzamiento de la hermana menor de la familia. La CB125R sorprendía a todos con una estética que replicaba el estilo de la impactante naked CB1000R y ponía en una moto apta para los poseedores del carnet B una moto equilibrada en componentes y ágil de manejo.
En esta reedición adaptada a la normativa Euro5 se mantienen los elementos esenciales de la parte ciclo, aderezados con un nuevo motor que pasa de 2 a 4 válvulas y sube de potencia (14,75CV a 10000rpm) y par (11,6Nm a 8000rpm), rozando así el máximo permitido por la ley. A pesar de ello, conserva un espartano consumo de gasolina, que ronda los 2,1l/100km y la sitúa al nivel de los scooters más económicos en el día a día que existen en el mercado hoy por hoy.
…y un conjunto suspenso como ninguna otra naked de 125
Ahora bien, para ser interesante, una moto que apenas rebasa oficialmente los 105km/h debe hacer un buen trabajo en lo que sensaciones de conducción se refiere si quiere de verdad ser una alternativa interesante a un scooter de 125. Y es aquí donde la Honda CB125R se la ha jugado de verdad.
Y es que, sí, lo más destacable de esta actualización más allá de motor es lo que suspende, pero para bien. Honda ha decidido traer la suspensión de su hermana CB650R e incluir por primera vez en una moto de 125 una horquilla invertida Showa de 41mm con funciones (amortiguación y muelle) separadas por botella, lo que asegura una capacidad de absorción y un aplomo sin parangón entre sus competidoras.
Las naked KTM 125 Duke y Kawasaki Z125 tienen una competidora todavía más feroz
Si a la suspensión de otro nivel se suma una corta distancia entre ejes, un chasis y basculante caracterizados por la ligereza, un manillar ancho y fácil de mover, un efectivo sistema de frenos Nissin con ABS de doble canal, unas ruedas de medida generosa y un peso de tan solo 130kg, tienes una moto de 125 ágil y noble con la que exprimir a conciencia tus incursiones en ciudad y fuera de ella.
Además, la Honda CB125R conserva su atractiva estética café racer del futuro, con sus inconfundibles luces Led marca de la casa, su afilado colín y carenados y una pantalla Led minimalista en concepto pero muy completa en información.
La actual versión se anuncia por 4300€ en la web oficial. A faltar de confirmación de precio para la versión de 2021, no nos cabe duda que esta Honda CB125R confirma su puesto como una de las motos naked más recomendables en el segmento de 125 si quieres dejar tu coche en casa y buscas algo más auténtico que una scooter.
Fuente: Honda Motor Europe