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Mercedes habla de éxito con la prueba piloto de la Vito E-Cell: ¿Éxito aplicable fuera de Alemania?

Se ha hablado largo y tendido sobre la propulsión eléctrica y sus beneficios para el tráfico rodado de las grandes ciudades. Si existe un lugar y un cliente que pueden sacar el máximo rendimiento a la propulsión eléctrica, ese es el oficio que requiera discurrir por cualquier transitada urbe. Servicios de paquetería, reparto, mantenimiento municipal o similares, todos albergan un largo tiempo inmerso en la congestión vial.

Las pruebas piloto contaban con el respaldo de compañías y distribuidoras eléctricas: ¿Será así con cada modelo que se venda?

Con esta idea en la mente, Mercedes-Benz a la par que electrificaba su gama para pasajeros, llevaba a cabo la conversión de su comercial más demandada, la Mercedes Vito. Esta furgoneta fue reconvertida en eléctrica, dando lugar a la Vito E-Cell sin apenas variar ciertos detalles de su estructura y sin disminuir sus mejores cualidades: la capacidad de carga y la versatilidad a la hora de trabajar.

Fabricada en la planta que posee la marca en Vitoria (España), este pasado año 2011 han salido de la cadena de montaje 400 Mercedes Vito E-Cell. La casa pretende seguir fabricándola al ritmo actual, pero ya han anunciado que planean nuevas variantes para un futuro próximo, lo cual elevará la producción de manera perceptible. Todo empezó con un proyecto piloto en las ciudades de Berlín y Stuttgart, donde se cedieron 50 Vito E-Cell a cada una de las ciudades para recopilar datos y evaluar las posibilidades del nuevo vehículo.

230 Mercedes Vito E-Cell se encuentran en funcionamiento

En la actualidad ya son 230 Mercedes Vito E-Cell las que están en circulación, y según Mercedes, existe un acumulado de 650.000 Kilómetros entre todas las unidades que está en activo. Los conductores de estas unidades van desde los trabajadores cuyo oficio se basa en la popular comercial día tras día, hasta personas que emplean el vehículo para laborales más esporádicas.

El recorrido urbano es el mejor hábitat de utilización para los vehículos eléctricos

Las conclusiones que arroja Mercedes tratan de que la versión eléctrica cumple sobradamente con las exigencias habituales de los usuarios. Las unidades en funcionamiento, cuyo principal uso es en recorrido urbano, arrojan la cifra de que la velocidad máxima que suelen emplear es de 55 Km/h, mientras que el grueso de utilización se encuentra en el margen comprendido entre los 15 Km/h y 30 Km/h.

La Mercdes Vito E-Cell es capaz de arrojar hasta 130 Km de autonomía

Con todo ello parece que la Mercedes Vito E-Cell cumple sobradamente con las exigencias de sus propietarios, un ejemplo de todo esto viene dado por el proyecto piloto en la ciudad de Berlín. Según la marca, el margen medio de empleo de sus baterías se encontraba entre el 20% y el 95%, por lo que la autonomía máxima de 130 Km, 80 Km en Invierno, parece ser un dato suficiente en estos casos.

Al hilo de la prueba realizada en Berlín, Mercedes habla también sobre la satisfacción plena de los participantes en similar prueba realizada en la ciudad de Stuttgart. El hecho de escoger esta ciudad, sede de la marca, fue motivado por la orografía con la que cuenta el terreno donde se ubica el centro urbano, con fuertes desniveles que pondrían a prueba las capacidades de la comercial eléctrica. Sin entrar en datos, Mercedes habla de un resultado satisfactorio en cómputos globales, lo cual puedes hacernos ver que el terreno es un factor altamente decisivo en la autonomía y que posiblemente, comprometiera a más de una unidad en fase de prueba.

Tras la prueba piloto en Alemania, Europa será el siguiente objetivo

Con un primer despliegue centrado en Alemania y unos resultados que ofrecen datos a favor, el fabricante pretende dar el siguiente paso, la llegada a otros mercados. Europa será el siguiente objetivo, por ello se planean más versiones sobre la misma plataforma para poder adaptarse a la demanda, una demanda que bien podría venir de países como España.

Con 6 horas para recargar la capacidad total de las baterías, la optimización de la ruta es algo fundamental para cumplir los objetivos

Pero la parte que se desconoce, o por lo menos en la que menos se recaerá, serán los servicios relacionados con la infraestructura y la adopción de estrategias para garantizar el que la autonomía no sea un lastre a la hora de trabajar. Me explico, una de las máximas a la hora de trabajar con un modelo de este tipo es el evitar a toda costa el quedarse tirado por agotamiento de las baterías, pues hablaríamos de desastre al paralizar nuestra ruta habitual.

La mejor opción imaginable se basaría en la posibilidad de recargar en cualquier punto con el tiempo suficiente para poder aumentar nuestra autonomía. En la actualidad se trata de una utopía

Esto se consigue mediante dos formas de hacer las cosas: un modo ídilico y otro más real, pero igual de complicado para hacerlo realidad. La manera idílica contempla la posibilidad de recargar de manera rápida en cada una de las paradas que hagamos en nuestro recorrido, esto implica lugar, tiempo y que sea realidad algún día, por lo tanto queda descartado, entonces nos encontramos con una segunda opción, la planificación de la ruta y la optimización de la misma según la autonomía disponible.

A grandes rasgos, esto quiere decir que emplearemos nuestro vehículo eléctrico para los recorridos mas favorables, lo cual en un trabajo de reparto implica un imposible a la hora de la verdad, pues ni por tiempo, ni por hechos podremos conocer ni la ruta, ni las paradas, ni el tiempo exacto que emplearemos en completar el total del trayecto.

Una realidad que se aleja bastante de las condiciones de ensayo

Pero no todo concierne a la ruta, ya que si tal cual revela Mercedes, nuestro oficio no necesita de más kilómetros que los que otorga la batería, nuestro problema solo residirá en la recarga. Y aquí es donde pienso que está el gran problema en realidad, ya que en Alemania, la marca ha contado con la disposición de compañías eléctricas, distribuidoras y diversas entidades públicas para llevar a buen puerto la posibilidad de recargar las Vito E-Cell en las instalaciones pertinentes.

En definitiva, el planteamiento de la Mercedes Vito E-Cell es una idea magnífica sin albergar la menor duda, pero tal cual se plantea la compra de un eléctrico en este momento, y más aún en nuestro país, pienso que si el trabajo en la gran ciudad es el mejor hábitat de los eléctricos, también es el que necesita del mayor impulso, como en el caso descrito, para no convertirse en un fracaso estrepitoso por haber adquirido uno de estos vehículos equivocadamente. Ojalá la realidad nos mostrara el beneplácito de las instituciones para poder llevar a cabo el cambio a la propulsión eléctrica, pero de momento habrá que seguir esperando.

Fuente: Mercedes-Benz
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