Tras años de tragar mucho polvo y de pasar muchas penurias completamente solos compitiendo al volante de dos pequeños buggies monoplazas, los hermanos Coronel han decidido dar el paso y competir en la próxima edición del Dakar juntos. Tim y Tom compartirán un nuevo buggy apodado cariñosamente “The Beast”, con una estética que a muchos les recordará a los antiguos Hummer con los que compitieron Robby Gordon y Nasser Al-Attiyah.

No es para menos, su creador es el propio Damen Jefferies, el cual ha preparado un nuevo buggy para que Tom pudiera volver al Dakar. El piloto holandés del Mundial de Turismos, el cual ha repetido en más de una ocasión el “I hate it, I love it”, decidió a final de la pasada edición que había tenido suficiente y que no volvería a repetir la experiencia de completar el rally-raid más duro del planeta en solitario. Sería su hermano, Tim, el que aparecería con la opción de Jefferies sobre la mesa y tras aceptarla, ambos competirán en el Dakar 2018 turnándose las labores dentro del coche de piloto y copiloto.

Será una experiencia completamente distinta. A pesar de que el propio Jefferies ha admitido que al coche le sobran unos 300 kilogramos (el conjunto está por encima de los 1.850 kg), la robustez que hace gala y los más de 400 CV de potencia que aporta el motor V8 6.4 litros de origen Chevrolet LS3, son garantías de éxito en lo que respecta a completar la prueba. Recordemos que no es la primera vez en que Tim (undécima participación) y Tom (quinta) compiten en el mismo coche, ya que ya lo hicieron en el Dakar 2009 dentro de un Bowler Nemesis. En este caso se han pasado a la tracción trasera y contarán con el experimentado Chris Leyds como team manager durante las dos semanas que durará la cita sudamericana.