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Oliver Bearman se destapa en Bakú y lanza su candidatura al título de la Fórmula 2

En tiempos recientes, es habitual que la Formula 2 siga a pies juntillas el periplo de la Formula 1 en lo que se refiere al calendario. Sin embargo, el arranque de este curso 2023 nos ha dado la particularidad de cuatro rondas consecutivas compartidas, incluído el singular viaje a Australia. De hecho, de no ser por Miami, la racha se habría alargado hasta el Circuit de Barcelona-Catalunya, la que será la octava prueba del mundial de F1. Entre tanto, la cuarta cita del campeonato, comandado por el japonés Ayumu Iwasa, llevó a la F2 a la capital de Azerbaiyán tras el parón primaveral. El siempre agitado Baku Street Circuit volvía a escena y lo hizo con un acertadísimo Oliver Bearman que tras un inicio llamativo per falto de resultados, se declara candidato al título.

El peculiar trazado azerí ha supuesto una suerte de ruleta rusa en lo que a resultados se refiere durante su breve historia. A la mezcla de arrojo y galones necesarios para ir rápido en un circuito urbano, se le debe sumar esa pizca de fortuna y la capacidad de evitar líos, un conjunto que no siempre se relacionaría con un debutante. Pero en esta ocasión, como ya hicieran otros ‘rookies’ de la escuela de Ferrari como Antonio Giovinazzi (entonces aún agente libre) o Charles Leclerc, el joven Oliver Bearman dio un golpe de autoridad que no se esperaba tan pronto y con tanta música.

Ya desde la sesión de clasificación, el británico maravilló a propios y extraños con una pole position tras un toque con el muro que dejaría la dirección de su PREMA en un estado delicado. A pesar de la complejidad de la tarea, fue capaz de dejar a Enzo Fittipaldi, a Théo Pourchaire y a su compañero, Frederik Vesti, sin premio el viernes. Una sesión no exenta de sustos tras el accidente de Brad Benavides y que dejó a los cuatro primeros en una décima de diferencia. Ralph Boschung, piloto de Campos, se quedó a una décima escasa de lograr la pole invertida.

Ese pequeño honor quedó en manos de un Richard Verschoor que apenas podría disfrutar de la posición preferente. Zane Maloney, segundo en parrilla, rebasó en los primeros metros al piloto neerlandés y este casi perdió el control del monoplaza en la primera curva. Aún manteniendo su Van Amersfoort en vereda, un toque con el de Barbados descolgaba su alerón delantero y forzaba a ambos al abandono, pues el de Carlin sufriría un pinchazo pocos metros después. Estos animados primeros compases, como ya es tradición en Bakú, dejaban al frente de la carrera a Dennis Hauger, sexto en parrilla. Victor Martins, también envuelto en la caótica salida, y Jehan Daruvala seguían de cerca al noruego con Jack Crawford y Vesti cerrando el top 5.

La carrera apenas tuvo cambios antes de entrar en su primer periodo de coche de seguridad. La detención de Ralph Boschung, que rompía la dirección de su Campos en la estrecha subida del castillo, agrupaba a los 19 supervivientes hasta la vuelta 6 de 21. Tras la resalida, el protagonismo lo reclamaron los dos pilotos de PREMA, ganando puestos y saliendo en persecución de Hauger y Martins. Esta situación se mantuvo hasta la vuelta 14, momento en el que Roy Nissany se encontró con el muro en la curva 15 y forzó un coche de seguridad. Y esto, en Bakú y con pocos giros para la bandera de cuadros, significaba tormenta.

Con solo tres vueltas restantes en el casillero, la resalida se resolvió, por decirlo de alguna forma, con una incomprensible concatenación de sucesos: Dennis Hauger impactó con el muro exterior de la primera curva en su afán por mantener el liderato. Por detrás, Victor Martins y Jehan Daruvala se accidentaron en sintonía y, en las posiciones inmediatamente anteriores, Théo Pourchaire, Arthur Leclerc y Jack Doohan cometieron sendos errores que les dejaron fuera de la prueba. De esta forma, la carrera quedaba con solo once pilotos en competición para las últimas tres vueltas…

Pero no llegó a haber tanta carrera. La situación dejaba inicialmente como líder y prácticamente vencedor a Frederik Vesti. Pero en la curva 4, un error de pilotaje del danés permitió que Oliver Bearman lanzara un audaz ataque que le valió la primera posición apenas unos segundos antes de la salida del coche de seguridad. La carrera ya no se relanzó, por lo que así llegó primer triunfo del joven piloto de Ferrari en Formula 2 y un doblete de PREMA, con Jack Crawford heredando el tercer lugar. Kush Maini y Enzo Fittipaldi cerraron el top 5.

En contraposición a lo que cabría esperar de una jornada dominical en Azerbaiyán y como contrapunto de la movida carrera del sábado, la carrera larga del fin de semana destacó por la falta de grandes incidentes. Oliver Bearman hizo valer su primera posición en una salida impecable y empezó a abrir hueco mientras, por detrás, Pourchaire y Fittipaldi se batían por la segunda posición. El francés acabó progresando hasta poder atacar a Bearman, intercambiando puestos hasta que el piloto de PREMA salió vencedor tras un duelo singular.

Las primeras paradas de pilotos con neumático ultrablando no tardaron en llegar, con el primer grupo acudiendo al pitlane en la vuelta 7 de 29, seguido poco después por el grupo de la lucha por el podio con Fittipaldi y Martins al frente. Bearman y Pourchaire aguantaron hasta la vuelta 9. Justo tras este ‘impasse’, llegó la única neutralización de la prueba, un Virtual Safety Car ocasionado por una desafortunada maniobra de Brad Benavides al intentar salir de una escapatoria.

A partir de este punto, la carrera se transformó en una partida de ajedrez a largo plazo debido al desgaste de neumáticos. Oliver Bearman se mantuvo al comando con mano de hierro y solo llegó a ver inquietada su victoria por un último arreón de Enzo Fittipaldi, que realizó una bonita maniobra sobre Théo Pourchaire por el segundo lugar entre las curvas 3 y 4 a falta de pocas vueltas. El brasileño sigue demostrando que lo del año pasado no fue flor de un día y empieza a justificar su ilustre apellido más de lo que se esperaba en el pasado, sobre todo tras caer fuera de la Ferrari Driver Academy.

Tras los 29 giros, Bearman vio la bandera a cuadros en primera posición una vez más, cerrando un fin de semana prácticamente perfecto, liderando todas las sesiones y quedándose a una vuelta rápida de obtener el máximo botín posible de 39 puntos. Fittipaldi y Pourchaire completaron el podio, repleto de jóvenes pilotos de escuderías de Formula 1, ilustrando la actual tendencia del campeonato. Victor Martins y Frederik Vesti completaron el top 5 en pista, aunque el francés terminaría descalificado por cuestiones técnicas en su ART. Debido a esto, Kush Maini ascendió a una respetable quinta posición gracias a la estrategia propuesta por el equipo Campos. El piloto indio es quinto en la general y una de las grandes sorpresas positivas de este 2023.

En esta clasificación general, Théo Pourchaire es el nuevo líder con 65 puntos, tres más que Frederik Vesti y siete por delante de Ayumu Iwasa, en un fin de semana horrible sin puntos. Cuarto es ya Oliver Bearman, protagonista de un escenario ya visto en esta pista en 2016. En aquel entonces, Antonio Giovinazzi, también enrolado en el equipo PREMA, se quedó también a una vuelta rápida del fin de semana perfecto. A Bearman, le fastidió la fiesta un Isack Hadjar que le impidió igualar un hito inédito en la FIA Fórmula 2, el del fin de semana perfecto, que sí lograron Nelson Piquet Jr. y Nico Hülkenberg en la GP2.

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