La última incorporación al selecto club de los Ferrari Special Projects aún nos mantiene con la boca abierta. Bautizado como Ferrari KC23, estamos ante el capricho definitivo de los amantes de las carreras de coches, pues en definitiva estamos ante un bólido de competición carrozado a medida y sin necesidad de cumplir ninguna normativa. Por ello, el vídeo del Ferrari KC23 en circuito que hoy te traemos es la mejor demostración de que, a estas alturas, ya es posible llevarte a casa un deportivo mejor que su versión de carreras.
El proyecto del Ferrari KC23 es el segundo que acomete la fábrica de Maranello en este sentido, pues hasta el estreno del P80/C, la firma italiana siempre había centrado los trabajos de Special Projects en la creación de deportivos a partir de un modelo de calle. Pero hábida cuenta de los programas de carreras privados como el XX de la propia Ferrari, estaba claro que tarde o temprano algún cliente pondría sobre la mesa el suficiente dinero e interés para convencer a la marca a animarse con coches de carreras a medida.
Y así ha sido. La base del Ferrari KC23 es una montura con bastante pedigrí para el constructor, un 488 GT3 EVO que ha reportado numerosas victorias al fabricante y que, ahora que ha sido reemplazado por el 296 GT3, se ha reconvertido en la base ideal para cumplir algunos caprichos.
Ferrari ha empleado chasis, interior y configuración mecánica del 488 GT3 EVO, lo que se traduce en el uso de un motor 3.9 V8 Twin-Turbo capaz de desarrollar 600 CV bajo reglamentación FIA, pero que ahora podría haber elevado considerablemente esa cifra al no tener que cumplir con ninguna normativa.
Esta falta de cumplimiento normativo, pues estamos ante un coche que no será homologado para carretera, también ha permitido a los diseñadores de Ferrari dar rieda suelta a su imaginación, trabajando de forma considerable en la aerodinámica para crear una máquina que no sólo cuenta con soluciones tan llamativas como el enorme alerón fijo posterior, el difusor trasero ocupando la práctica totalidad de la zaga o el uso de cámaras como reemplazo de los retrovisores, sino que ahora añade aerodinámica activa. Estos elementos móviles, que están situados en el lateral del modelo, permiten modificar el flujo de aire desde justo detrás del paso de rueda delantero y desde la toma de aire que se ubica tras las puertas.
Es por ello que, aunque no sabemos aún quién ha sido el afortunado comprador de este coche, esperamos y deseamos que se anime a exprimir todo el potencial de esta criatura en circuito, pues como bien queda demostrado en el vídeo que acompaña este texto, Ferrari no ha escatimado en ideas para crear un KC23 que se olvida por completo de las restricciones a las que está sometida su base de competición.