Aunque considere una especie de ídolos personales a la gente de Boba Motoring en Alemania, lo cierto es que hay héroes más anónimos, que vienen de lugares insospechados. Es el caso de este desconocido Volkswagen Golf R32 Mk4, que ha recibido una preparación que lo catapulta a una órbita estratosférica. Si bien no disponemos de tanta información y material audiovisual como con el Golf de 1.233 CV de Boba Motoring, os aseguro que este R32 con motor V10 de un Audi RS6 y 1.170 CV merece toda nuestra atención.
Los comienzos de la preparación son un tanto oscuros, y sobre ellos únicamente podemos especular. Todo comenzaría con un Audi RS6 C6 accidentado, cuyo motor 5.0 V10 Biturbo aún era aprovechable. Los Audi RS6 de la anterior generación llegaron a desarrollar la friolera de 580 CV. Dicho propulsor fue extraído del vano motor del Audi y montado como buenamente se pudo en la parte delantera del Volkswagen Golf R32. El reparto de pesos del coche no parece demasiado favorable, eso os lo podemos asegurar.
El enorme V10 asoma por encima del capó, que ha sido cortado para dejar sitio al TFSI de altos vuelos. El motor ha sido montado junto a la caja de cambios tiptronic de seis relaciones y la unidad de control electrónico, así como su instrumentación. Ignoramos qué ha ocurrido con el sistema de tracción integral del Volkswagen, pero entendemos que ha sido conservado – y esperamos que reforzado. Si pensábais que el motor habría quedado instalado con su potencia de serie, es que sois demasiado inocentes aún.
Un taller albano, bajo el nombre en clave de «GoGi», ha llevado su potencia hasta unos alucinantes 1.170 CV. Una cifra desproporcionada que viene de la mano de un par máximo de 1.578 Nm. Peccata minuta, en definitiva. Por si esto fuera poco, los gases y llamaradas de escape emanan por la parte superior del capó y las ópticas delanteras están huecas, albergando en su interior los filtros de aire de la admisión del V10. El tren de rodaje habría sido reforzado convenientemente y el coche equipa semi-slicks en busca de una mejor tracción.
Por último, no queda más que contemplar el resultado de esta transformación en dos vídeos. Dos vídeos que no muestran demasiado, pero sí lo suficiente. Este frankenstein del Grupo Volkswagen es un auténtico misil.
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