Pese a que aún tendremos que esperar algunos meses para conocer a la nueva generación de MINI, BMW ha decidido descubrir las primeras imágenes oficiales de este modelo, aunque aún camuflado. El nuevo MINI 2023 promete novedades en tecnología, electrificación y equipamiento, pero quizá el punto que más nos ha llamado la atención es el posible «reset» en materia de diseño. Tras 3 generaciones evolucionando el concepto que dio lugar al MINI moderno, quizá ha llegado el momento de recuperar la imagen y proporciones del MINI original.
No es ningún secreto que el MINI ha cambiado mucho a lo largo de los años. El renacimiento de la marca en 2001 de la mano del diseño esbozado por Frank Stephenson Santos consiguió un notable éxito comercial, algo posible gracias a una reintepretación de las claves de diseño del MINI original, aunque adaptándolas a un mercado y sociedad totalmente diferentes.
Del éxito de aquel MINI R53 hace ya 20 años, lo que se ha traducido en 3 generaciones que han buscado evolucionar la receta de 2001. Sin embargo es justo admitir que a lo largo de ese camino, el MINI ha crecido de forma sensible y ello ha motivado la pérdida de parte de su esencia, además de la modificación de sus proporciones y elementos visuales más característicos.
Aunque aún no sabemos cuánto medirá el nuevo MINI, estas primeras imágenes nos dejan ya con una visión más cercana al modelo de 2001 que a la actual generación. Se mantienen los ragos más característicos del modelo: faros redondos, techo flotante, ruedas de gran tamaño, etc. Pero llama la atención la reducción de los voladizos, algo que será muy aplaudido por los fans de la marca.
A nivel técnico, este nuevo MINI 2023 será construido a partir de la plataforma modular FAAR de BMW de tracción delantera sobre la que se construyen los BMW Serie 1 o X1, estando confirmada su fabricación en la planta de MINI en Oxford, Reino Unido. La gama de propulsores inicial contará con mecánicas gasolina, diésel y eléctrica, siendo esta última una de las piezas clave de este modelo ya que para 2025 está previsto que la marca se despida para siempre de los motores de combustión interna.
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