Las berlinas no han muerto, al menos al otro lado del charco. Subaru acaba de presentar en el Salón de Chicago la nueva generación del Legacy. El Subaru Legacy tiene sus orígenes plantados en los años 80, y desde entonces ha sido un coche que ha cumplido las máximas de la marca: motores bóxer y tracción total permanente siguen siendo sus señas de identidad más importantes. Esta nueva generación está construida sobre la nueva plataforma global modular de Subaru, y entre otras novedades, trae bajo el brazo motores de hasta 260 CV y la mayor dotación tecnológica de su historia. Pasen y vean.
¿Cómo es el Subaru Legacy 2019?
A nivel de diseño es un coche que no arriesga. Su frontal es similar al de lanzamientos recientes de la marca, como pueden ser los renovados Subaru XV. Su perfil lateral tiene un aspecto orgánico bastante armónico, que desemboca en una zaga discreta. Quizá el punto más interesante de su diseño sea la suave caída del techo hacia un tercer volumen bastante corto. Aunque sea un coche conservador a nivel estético, bajo la piel es una máquina completamente nueva. De hecho, la plataforma global modular sobre la que se construye es un 70% más rígida que la que vertebraba al anterior Subaru Legacy.
Gracias a esta nueva plataforma se ha rebajado el centro de gravedad del coche, lográndose un mejor paso por curva y reacciones dinámicas. Algo realmente positivo cuando queramos explotar el rendimiento de sus nuevos motores turboalimentados: es la primera vez que el Legacy tiene motores turbo de gasolina desde el año 2012. El tope de gama es un nuevo bóxer de cuatro cilindros y 2,4 litros, capaz de desarrollar 260 CV y 375 Nm de par motor máximo. Este motor está obligatoriamente asociado a un sistema Symmetrical AWD de tracción total permanente y a un cambio CVT de variador continuo.
Este motor propulsa al Legacy hasta los 96 km/h en 6,1 segundos. A este motor se suma un 2.5 bóxer atmosférico con 182 CV de potencia como motor de acceso. Como estaréis temiendo ya, no existirán versiones con cambio manual en el Subaru Legacy. Aunque la información de este artículo se refiere a los Subaru Legacy del mercado estadounidense, es poco probable que el mercado europeo reciba cambios manuales, y tampoco es probable que vuelvan las mecánicas diésel a Subaru. Otra de las novedades de este nuevo Legacy es que todos montarán de serie el sistema de seguridad activa EyeSight con doble cámara.
El sistema EyeSight estrena un nuevo sistema de detección de fatiga, así como un control de crucero adaptativo con función de centrado del coche en nuestro carril. A estas funciones se suman la detección de vehículos en punto muerto o la frenada automática de emergencia. El interior del Subaru Legacy no solo es un lugar mucho más seguro, es mucho más moderno y tecnológico. Aunque el coche no tenga instrumentación 100% digital, estrena un nuevo sistema de infotainment Starlink, con una pantalla vertical de 11,6″ – ahora con completa compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto.
El sistema Starlink también es capaz de ser el punto de acceso a internet para los dispositivos electrónicos de los ocupantes, mediante una conexión 4G – los pasajeros de las plazas traseras también podrán cargar sus tables y teléfonos a través de varios puertos USB. Subaru también ha trabajado en mejorar las calidades y los acabados del interior de su berlina, cuyo salpicadero puede estar rematado en el mismo cuero que los asientos delanteros. Según la nota de prensa, las plazas traseras han crecido tanto en espacio para las rodillas como en ancho, permitiendo el viaje cómodo de tres pasajeros en la segunda fila.
Entre sus rivales más directos estarán los Honda Accord, Toyota Camry, Hyundai Sonata o Volkswagen Passat.
Subaru Legacy 
