El nuevo Toyota Land Cruiser ya está aquí, uno de los todoterreno referentes y con una reputación libre de tacha, al atribuírsele, merecidamente, una fama de fiabilidad y durabilidad muy elevada para cualquier vehículo de cuatro ruedas. Pero tiene un gran problema. Por 76.050 euros, el precio de la versión VX, es evidente que está fuera del alcance de la mayoría de los bolsillos, independientemente de que busquemos un 4×4 competente para salir del asfalto o un vehículo grande y familiar para hacer muchos kilómetros por carretera.
La alternativa «barata» al Toyota Land Cruiser
Allá por los años ochenta Toyota tuvo una idea brillante. Extendiendo y cubriendo su carrocería, un Toyota Hilux podía convertirse en un SUV y en un buen todoterreno. Y así nacía el Toyota 4Runner, un vehículo imponente, con una estética muy todoterreno, y que más allá de las apariencias podía ser, de nuevo, un 4×4 tremendamente capaz para superar las pruebas más duras, pero también un buen SUV con el que ir a la oficina y práctico para aquellos sin el más mínimo interés de salir del asfalto.
Y así hasta nuestros días. Cuatro décadas después el Toyota 4Runner se renovaba siendo, más que nunca, el alter ego económico del Toyota Land Cruiser, y sigue actualizándose, ahora con un nuevo MY2026.
Más barato, pero esconde un Toyota Land Cruiser en su interior
La misma base de un Land Cruiser 250. El Toyota 4Runner es, en el fondo, un Land Cruiser con un traje diferente, compartiendo con el mejor todoterreno de Toyota su plataforma TNGA, de largueros y travesaños, con acero de alta resistencia combinado con aluminio.
No obstante, y a diferencia del Land Cruiser 250, el Toyota 4Runner sí puede adquirirse con un eje motriz en las versiones inferiores, y por supuesto con dos ejes motrices, bloqueo de diferencial central y bloqueo trasero de serie en las versiones más preparadas para salir del asfalto.
Desconexión de estabilizadora. Como en Land Cruiser 250, el 4Runner también dispone de desconexión electrónica de la barra estabilizadora, que hasta ahora era de serie en las versiones más preparadas, Trailhunter y TRD Pro, y que con la llegada del MY 2026 ya puede incluirse en versiones TRD Off‑Road Premium con i‑FORCE MAX.
Todo el kit de herramientas todoterreno y electrónica que ya conocemos en el Land Cruiser 250
Incluido el selector de modos Multi‑Terrain Select (en 4H y 4L), CRAWL Control (el “control de crucero” para conducción todoterreno) y monitor Multi-Terrain con visión 360°.
Versiones muy preparadas para todoterreno de serie
A diferencia del Land Cruiser 250 de que disponemos en España, el 4Runner sí dispone de versiones con una preparación todoterreno de serie bastante radical. De manera que podemos encontrarnos con unos Limited y Platinum de filosofía más SUV, con suspensiones adaptativas y pensadas para el confort en carretera, hasta las más radicales Trailhutner y TRD Pro con suspensiones reforzadas ajustables.
- TRD Pro: enfoque rally‑raid con FOX QS3, neumático 33″ Toyo, performance intake/exhaust, parrilla TOYOTA con LED bar y asientos SofTex calefactados/ventilados (interior Black o Cockpit Red).
- Trailhunter: esnórquel de baja sección, compresor a bordo, ruedas 33″ en llanta 18″ bronce, rack ARB, LED RIGID y detalles en bronce.
- TRD Off‑Road: protección inferior reforzada, MTS + CRAWL, bloqueo trasero y, en Premium, Monitor Multi‑Terreno, pantalla 14″ con JBL y portón manos libres.
El motor híbrido todoterreno que echamos de menos
El Toyota 4Runner dispone también de dos alternativas mecánicas, una de gasolina y turbo con 282 CV de potencia, y otra híbrida específica con la que ya llega a los 331 CV, y que es sin duda la mecánica más interesante. A diferencia del Land Cruiser 250 en España, que por razones obvias, y por lo que pide el mercado, se comercializa con un motor diésel con sistema híbrido ligero a 48V, Toyota dispone en Estados Unidos de un sistema híbrido completo específico para todoterreno.
- i‑FORCE 2.4 Turbo de 282 CV
- i‑FORCE MAX (híbrido): 331 CV
Sigue siendo más barato que un Toyota Land Cruiser (pero no mucho)
(empieza en 41.570 dólares con motor gasolina, por 52.790 dólares con motor i‑FORCE MAX y por 57.200 dólares está el Land Cruiser con motor i‑FORCE MAX, traducir precios a euros)
El Toyota 4Runner es, ante todo, un todoterreno que aún fabricándose en Aichi, Japón, junto al Land Cruiser 250 de que disponemos en Europa, sigue siendo un 4×4 por y para Estados Unidos, que ha sido desarrollado al otro lado del Atlántico y cuyas probabilidades de que lo veamos en Europa son ínfimas, por no decir nulas.
Evidentemente una de las claves de este modelo reside en que su precio de partida es mucho más ajustado, partiendo de 41.570 dólares, frente los 57.200 dólares del Land Cruiser en los concesionarios estadounidenses.
Land Cruiser 250
No obstante, no son pocas las críticas que ha recibido al respecto de un precio que ya no es tan contenido como antes, probablemente propiciando que muchos clientes tradicionales de 4Runner acaben optando por Land Cruiser, una opción mucho más premium. Y es que si tenemos en cuenta que por 57.200 dólares el Land Cruiser estadounidense ya dispone de motor híbrido, y que el 4Runner híbrido ya parte de 52.790 dólares, nos percatamos de que la diferencia de precios se reduce bastante.
