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Yamaha tuvo una idea brillante. No solo apostando por un tipo de "moto" - nótese el entrecomillado - muy especial, con tres ruedas, siendo más estable y segura que un scooter tradicional, pero también más potente, y todo ello permitiendo que podamos conducirla con el carné de coche, como sucede con la Yamaha Tricity 300. Una idea brillante, con sus pros y sus contras Y aún más brillante pensando en que había una oportunidad lanzando

No son las más ágiles entre el tráfico, son caras, pero para muchos se han convertido en una alternativa ideal a la moto, para moverse por la ciudad y la carretera con una solvencia mayor que en un coche y un coste por kilómetro ínfimo. Una "moto" con tres ruedas en lugar de dos La que hoy nos ocupa, por si no fuera poco, es una moto de tres ruedas tan barata y casi tan ágil y ligera como un scooter de dos ruedas. Una rara avis con la

Ni motos, ni microcoches. Las mal llamadas motos de tres ruedas se han convertido en una solución perfecta por muchísimas razones. Cuando tres ruedas son mejor que dos Son más estables y proporcionan más sensación de seguridad que un scooter de dos ruedas, especialmente por su bloqueo vertical en parado. Pero también son mucho más potentes que un scooter de 125, y aún así pueden conducirse con carné de coche. De ahí que sean una

Son muchas las razones para escoger una moto de tres ruedas para movernos a diario. Lo es su estabilidad, pero también el hecho de poderlas conducir con el carné de coche. También que podamos disponer de un vehículo mucho más potente que un scooter, de nuevo, para el carné de coche. El exotismo de la que hoy nos ocupa, la tres ruedas más barata de Yamaha, radica en que precisamente renuncia a esa potencia para conseguir un precio imbatible

Única en su especie. Porque no son pocas las mal llamadas motos de tres ruedas que podemos encontrar en el mercado, pero la propuesta de Yamaha, por diferentes razones, es única. Un concepto el de las tres ruedas que tiene sus pros y sus contras, que no es tan ágil para moverse entre el tráfico como un scooter, ni son tan baratas, pero sí ofrecen una estabilidad y una seguridad - o al menos sensación de seguridad - que atrae a muchos conduc

Yamaha riza el rizo con una tres ruedas que no solo destaca por ser más segura y estable que un scooter. Su precio, dimensiones exteriores y manejabilidad son también comparables con los de un scooter tradicional, convirtiéndola en la tres ruedas más barata del mercado. Además, el concepto de la Yamaha Tricity 125 es único, muy alejado de otras motos de tres ruedas, que suelen ser significativamente más caras, potentes y grandes. Tod

Es única en su especie. Ya no solo emplear tres en lugar de dos ruedas, sino sobre todo por una concepción muy diferente a la del resto de las mal llamadas - aunque la denominación haga mucho más comprensible el concepto - motos de tres ruedas, siendo mucho más ligera, económica, manejable, pero también con un handicap importante. Una moto de tres ruedas única y muy barata Yamaha dispone una tres ruedas única, una Tricity 125 que e

Pocos son los hogares que pueden permitirse tener dos coches, siendo uno de ellos de uso esporádico o viajes, y otro exclusivamente urbano. Es por ello que cobran mucho sentido alternativas para la ciudad como la Yamaha Tricity, una moto de tres ruedas de 125, 11 CV, consumo 2,3 litros a los 100 y que, por 4.499 euros, podemos conducir con el carnet de coche. Es más segura que una scooter, una moto de tres ruedas y 11 CV que puedes conducir co

Las scooter son soluciones de movilidad ideales si vivimos en una gran ciudad. Son económicas, gastan muy poco combustible y podemos aparcarlas en casi cualquier sitio. No obstante, con respecto a un coche estamos desprotegidos ante los elementos y en caso de accidente. Existe una solución a caballo entre las scooter y los coches que mejora nuestra seguridad, reteniendo las ventajas de una scooter. Son las motos de tres ruedas, y esta no solo e

En el amplísimo espectro de la movilidad urbana, las motos de tres ruedas tienen una presencia casi anecdótica, pero los que conviven con ellas a diario hablan maravillas de este tipo de vehículos. Una de sus claves está en su gran estabilidad, que las convierte en motos más seguras que una scooter convencional. A cambio, son más aparatosas y caras. Sin embargo, la moto que protagoniza este artículo no solo consume 2,3 l/100 km, si no que