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Un nuevo algoritmo podría eliminar accidentes y atascos en las intersecciones

Un equipo de investigadores del Virginia Tech Transportation Institute, VTTI, ha presentado recientemente un algoritmo creado en base a sistemas de conducción autónoma para llevar a cabo cruces en intersecciones sin necesidad de detención y eliminando cualquier posibilidad de colisión. El escenario escogido han sido las intersecciones entre cuatro caminos, pero ya se está estudiando la aplicación en otros escenarios como rotondas.

La condición fundamental para el empleo de este nuevo algoritmo es el uso de la conducción autónoma, premisa sobre la cual el sistema es capaz de gestionar todos los vehículos que se encuentran en un radio de 200 metros alrededor del punto de cruce. Con este alcance los investigadores postulan que se puede reducir la congestión del tráfico, eliminar las detenciones por espera y reducir los riesgos de colisión.

Comunicación vehículo-infraestructura para las carreteras del futuro

Se trata de una tecnología que emplea una protocolo de comunicación entre vehículos e infraestructura para adecuar los tiempos de cruce entre las distintas vías. Con el radio máximo de 200 metros, el sistema es capaz de calcular y adecuar la transición entre las distintas direcciones para que, en función de velocidad y volumen de tráfico, se emplee el mínimo tiempo posible en llevar a cabo la maniobra.

Estos desarrollos servirán para la implantación de los sistemas de comunicación Car2Car y la evolución de la conducción autónoma

Un ejemplo muy clarificcador sobre cuál sería el resultado de este desarrollo, lo podríamos tener visualizando cualquier intersección actual. Si dicha intersección es grabada y visualizada a posteriori a varias veces su velocidad real, se conseguiría un efecto de flujo ordenado donde todos los vehículos confluyen en armonía sin riesgos aparentes. Esta es la idea que pretende impulsar este desarrollo.

La mayor ventaja del sistema reside en el estudio real que realiza sobre numerosas variables en tiempo real. Como ejemplo encontramos la influencia climatológica, las características del vehículo como potencia, velocidad y peso, estado del tráfico de la vía… En definitiva se trata de un algoritmo cuya mayor cualidad reside en el amplio espectro de evaluación, ofreciendo una importante herramienta para el papel protagonista que tendrán que desempeñar las infraestructuras tanto en comunicación bidireccional como el protocolo Car2Car o los sistemas de conducción autónoma.

Fuente: GreenCarCongress
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