Recuerdo que de pequeño me encantaban las limusinas, unos enormes trastos vinculados con el lujo y la estridencia que llamaban la atención allá por donde iban. Sin embargo, a medida que fueron pasando los años, mi percepción hacia este tipo de vehículos fue evolucionando, debido a la incongruencia que representan y a la pérdida de exclusividad que sufrieron en Europa, con la proliferación de numerosas empresas que se dedican a alquilarlas para cualquier tipo de evento festivo imaginable.
No obstante, aún tienen adeptos, y siguen siendo una buena solución para celebrar cumpleaños o despedidas de solter@, por poner dos ejemplos. Lo más popular por las carreteras europeas suelen ser los Lincoln o Hummer stretched provenientes de EEUU, pero cada vez es más común encontrarse creaciones artesanales horripilantes. La empresa británica Limo Broker acaba de anunciar que está preparando una limusina de este último tipo (obviamente no la ha calificado como horripilante), basada en un Audi R8. La imagen superior deja bien claras sus intenciones.
Por el momento son bocetos, pero podemos tomarnos estas intenciones muy en serio, puesto que en su página web podemos ver una Ferrari 360 Modena reconvertido a limusina. En el caso del Audi R8, pretenden respetar la “filosofía” que estrenaron con el Ferrari: en lugar de crear un habitáculo con asientos enfrentados centrado puramente en el divertimento, las imágenes permiten ver que se van a instalar seis asientos tipo bucket adicionales distribuidos en tres filas, con lo cual estamos más bien ante un minibus que alcanza velocidad de vértigo que ante una limusina propiamente dicha.
En el exterior se mantiene el frontal y la zaga del Audi R8 original, y también el característico detalle de las side blades, las cuales se puede apreciar que van en fibra de carbono vista. El desarrollo parte de la base del Audi R8 5.2 FSI, por lo que en la zaga nos encontraremos el motor 5.2 V10 de 525 CV. De momento no se sabe qué cambios mecánicos van a realizar al coche, pero es de esperar que la rigidez estructural se mejora ostensiblemente. Por supuesto, las prestaciones se verán reducidas notablemente debido al aumento de peso.
Como reza el título, el coche resulta un despropósito, puesto que ya hay que tener ganas de partir en 2 todo un Audi R8 V10 para añadir una buena cantidad de chapa extra entre medias. No obstante, no es la primera ni la última vez que vemos deportivos reconvertidos en limusinas. Hace no mucho tiempo veíamos un Ferrari F40 limusina, y tiempo atrás supimos que Ferrari pensaba denunciar a los creadores de un Ferrari 360 limusina. No es para menos, puesto que esto daña la imagen de marca, al menos para mi gusto.
Fuente: WCF
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