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La historia de la semana: Sudáfrica y el gran premio entre dos años

Desde 1963, no ha habido un solo gran premio puntuable para el campeonato del mundo de Fórmula 1 en diciembre. Aunque la temporada 2015 se queda a tan solo dos días y supone la carrera más tardía dentro de un año natural en 50 años, sigue siendo en noviembre. Pero hay historias aún más originales que la de una carrera en el último mes del año, como la del Gran Premio de Sudáfrica de 1965, el gran premio entre dos años.

A principios de los años 60, el Gran Premio de Sudáfrica en el circuito Príncipe Jorge -Prince George, pero por eso de traducir los nombres…- de East London solía ser la última carrera del calendario. Tras disputarse la carrera el 28 de diciembre en 1963, el año siguiente estaba prevista una situación parecida en la que la carrera debía disputarse el último fin de semana del año tras participar en el Rand Grand Prix, carrera no puntuable en Sudáfrica que solía servir para preparar el verdadero gran premio.

Pero tras revisar el calendario a principios de año, hubo una sorpresa inesperada. El último fin de semana de diciembre era los días 25, 26 y 27 y con Navidad de por medio, la carrera no podía tener lugar. Esta no podía adelantarse porque entonces eso obligaría a cambiar el calendario global tanto de carreras puntuables como no puntuables, incluyendo el Rand Grand Prix, última carrera no puntuable del año que tenía lugar en Sudáfrica un par de semanas antes.

La solución fue tan simple como sorprendente; el campeonato de 1964 finalizaría en México -¡y menuda conclusión acabó teniendo!- y el Gran Premio de Sudáfrica se retrasaría unos pocos días… ¡convirtiéndose en la primera carrera de 1965! Más allá de esta inusual decisión, puesto que la Tasman Series daría comienzo el 9 de enero en Nueva Zelanda, la carrera en East London no podía demorarse en exceso. Pero al ser la primera carrera de la temporada 1965, no podía disputarse antes del fin de año.

Al final, se tomó la decisión salomónica que resultó tan extraña como única en la historia de la Fórmula 1. Los entrenamientos tuvieron lugar en los últimos días de 1964 y la carrera se disputó el primero de enero de 1965. De esta forma, la prueba podía mantener su estatus dentro del campeonato del mundo del nuevo año y se mantenían las fechas de la Tasman Series, con los pilotos teniendo que viajar inmediatamente una vez terminada la carrera. No fueron pocas las prisas para asegurar que todo el mundo llegaba a tiempo a la tierra de los kiwis.

El Gran Premio de Sudáfica acabó disputándose muy cercano en el tiempo a la carrera anterior -no puntuable-, en el mismo país. Por ello, no hubo ningún equipo que trajera los coches de la temporada siguiente al no estar aún listos. Esto afecto especialmente a Honda, que no disputaría la primera carrera del año. El resultado fue una parrilla extremadamente parecida a la de 1964 aunque con algunos pilotos nuevos, claro está. Una de las principales atracciones era precisamente Jackie Stewart, piloto debutante a los mandos de un BRM.

Por delante, Jim Clark volvió a demostrar una vez más que por algo había sido campeón en 1963 y candidato al título en 1964. El escocés volador estaba decidido a recuperar la corona y lo empezó a demostrar con una espléndida victoria con medio minuto de ventaja tras una bandera de cuadros que se mostró una vuelta antes de lo previsto. El podio lo completaron John Surtees con su Ferrari y Graham Hill con el BRM. Los tres protagonistas de 1964 seguían en plena forma aunque con los mismos coches, era de esperar.

Mike Spence con el segundo Lotus oficial finalizó la carrera en cuarta posición mientras que el Cooper de Bruce McLaren fue quinto. El último punto en repartirse fue para Jackie Stewart, que en su debut pilotó con seguridad y sin cometer errores, empezando a demostrar la fiabilidad de pilotaje de la que hizo gala durante toda su carrera deportiva. El Gran Premio de Sudáfrica de 1965 también supuso el debut de los neumáticos Good Year con el equipo Brabham, desafiando el dominio de Dunlop.

Desde entonces, la Fórmula 1 dejó a Sudáfrica como la primera carrera del año, posición que mantuvo durante un tiempo e incluso tras perderla, se quedó a principios de año hasta su marcha del calendario. También se ha abstenido la Fórmula 1 de tener grandes premios en diciembre -aunque en líos recientes de calendario, estuvieron a punto de darse algunos casos- Parece ser lo mejor, puesto que cuanto menos margen de maniobra hay, más posibilidades de darse una situación así. Y aunque en 1964 y 1965, una carrera podía pasar de un campeonato a otro sin demasiado problema, hoy en día esto sería impensable.

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