ESPACIOS
Cerrar CERRAR
Competición

2 MIN

La retirada de Cadillac obliga a cambiar el reglamento de la categoría GT3

¿Tiene sentido cambiar las reglas de una categoría exitosa porque una marca implicada en un solo campeonato decida abandonarlo? Suena rarísimo, pero va a ocurrir con los GT3 después de que hace unos meses Cadillac anunciara el fin de su proyecto ATS-V.R GT3. Un coche exitoso en el Pirelli World Challenge y nada más, pues la marca norteamericana jamás llegó a permitir que compitiera en cualquier otro campeonato.

Y es ahí donde radica el problema. Pese a que en su presentación se habló de repartirse el globo con el Corvette C7 GT3 desarrollado por Callaway, de manera que el Cadillac pudiera protagonizar participaciones puntuales en mercados interesantes como Australia u Oriente Medio mientras se reservaba Europa para el otro GT3 de General Motors, esas promesas jamás se cumplieron. Todo ello mosqueando a Stéphane Ratel y la FIA.

Esa es la razón principal por la que se va a imponer un mínimo de 20 unidades fabricadas para cualquier vehículo GT3 homologado. SRO y FIA quieren evitar que haya proyectos de fábrica y miran con especial recelo a Honda y Lexus, que deberán incrementar su presencia en la categoría de cara a 2019 y vender más unidades si no quieren recibir un toque de atención. Otras marcas con poco mercado como Bentley o Nissan parecen estar a salvo según explicó Stéphane Ratel a AUTOhebdo y en sus versiones 2018 del Continental y el GT-R han buscado fomentar la puesta en pista de más unidades carreras-cliente.

No parece mala medida, pero tampoco podemos perder de vista que una medida así ahuyentará a posibles fabricantes exóticos que deberán contentarse con homologaciones nacionales o campeonatos de segunda. Hablamos por ejemplo de la voluntad de la Scuderia Glickenhaus de ir más allá de su habitual participación en las 24 Horas de Nürburgring…

Via | AUTOhebdo
Foto | Cadillac

Cargando...