¿Puedes usar sierras circulares en vez de ruedas para conducir sobre hielo? (+vídeo)

Posiblemente no te hayas hecho nunca esa pregunta. Y es lógico: España no es un país donde los lagos se suelan congelar de forma habitual. En Finlandia, el país de los mil lagos, es una ocurrencia habitual. La superficie helada de los lagos permite conducir coches sobre ellos, e incluso permiten el aterrizaje de aviones cuando el espesor del hielo es suficiente. Es una superficie ideal para «hacer manos» con un coche como un Nissan 370Z o para hacer experimentos tan locos como el de «Beyond The Press»: han reemplazado las ruedas de su coche por sierras circulares, y han conducido sobre un lago helado.

El cana de YouTube «Beyond The Press» es el segundo canal de los genios finlandeses tras «The Hydraulic Press Channel», una de las sensaciones de YouTube de los últimos años. En este canal llevan a cabo experimentos, como ver qué sucede cuando maltratas hasta la destrucción un disco de freno. Su último experimento es uno de los más curiosos que hemos visto últimamente, rozando el nivel de los rusos de Garage54. Han reemplazado las ruedas de su Subaru Legacy AWD con sierras circulares de 60 cm de diámetro y más de un centímetro de grosor. La idea es ver qué ocurre conduciendo sobre hielo.

Concretamente sobre un lago helado… ¿qué podría salir mal? Se han asegurado que la zona en la que han probado su creación tenía suficiente espesor, y afirman que el hielo tenía cerca de medio metro de grosor. Con tan poca superficie de contacto y con «neumáticos» tan agresivos – los dientes del disco de sierra están muy afilados – sería sencillo atravesar el hielo. El conductor no se abrocha el cinturón de seguridad y conduce con la ventanilla abierta, en previsión de posibles problemas. En verdad el mayor problema del experimento ha sido la baja capacidad de tracción del coche.

Incluso pisando a fondo y contando con un sistema eficaz de tracción total el coche apenas no llega a superar los 10 km/h. El agarre es simplemente insuficiente. Por fortuna, el hielo ha soportado el peso del coche, que ha llegado a hacer un surco de más de 5 cm de profundidad en su superficie. Tras un breve paseo por el lago, conducen a más velocidad sobre caminos helados, en los que el coche logra alcanzar más velocidad, pero en ningún momento llega a parecer del todo estable o seguro. El experimento ha sido exitoso, pero no os recomendamos tratar de recrearlo en casa.