Según afirma el Finacial Times la alemana BMW ha remitido una carta para alentar a una serie de empleados a que adquieran coches de la compañía para su uso personal en lugar de irse a vehículos de la competencia como los de Audi o Mercedes.
En total se habla de unos 7.000 empleados que tienen coches de estas marcas. A ellos BMW les ha dicho: “¿Dónde está el error aquí? Te gusta trabajar para nosotros, le tienes cariño a tu lugar de trabajo y a tu salario. Pero conduces un coche de la competencia.”. Siendo un trabajador del fabricante germano debe de ser una sorpresa encontrarte una carta así cuando sales de la factoría, apostada en el parabrisas de tu coche y firmada por dos máximos directivos.
BMW contempla en la carta que quienes lo desean pueden responderla para conocer más detalles sobre los BMW, solicitar una prueba de un modelo en concreto o directamente cómo cambiar su actual vehículo por un BMW. Parece ser que han recibido un bajo porcentaje de respuestas, en torno a unas 100 cuando se escribió la noticia. Y ello tampoco quiere decir que se completara una compra.
Hasta aquí la realidad y a partir de ahora la reflexión. ¿Es moral realizar una recomendación así a tus propios trabajadores? Obviamente en su libertad reside el elegir el coche que más se acomode a sus necesidades o que simplemente les guste más. Por otro lado BMW puede optar por realizar esa campaña de publicidad como se haría en cualquier otro lugar, aunque puede que incluso esa actividad sea ilegal en el lugar en el que se realiza.
Nos falta un dato bastante relevante y es si esas cartas van dirigidas directamente a una persona con nombre y apellidos o es anónima, porque el asunto cambia bastante. Con nombres la misiva parece una táctica de acoso en toda regla que debería ser perseguible por la justicia. Si hay algún entendido en leyes que se pronuncie por favor.
Y por último, ¿necesita BMW llegar a ésto? Precisamente no es la marca que más esté sufriendo la crisis, ni ella ni la gran parte de las marcas Mini y Rolls-Royce que están bajo su posesión. Si lo pensamos en la proporción de ventas a empleados, de los 1.4 millones de unidades vendidas en 2008 por BMW sólo 8.000 fueron para empleados a pesar de que en plantilla tienen 100.000 trabajadores.
Es un bajo porcentaje pero, ¿es suficiente para justificar una actuación así?
Vía: financial-times
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