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Espresso Veloce: la cafetera perfecta para los amantes del automóvil

Tiene que ser algún tipo de fetiche que tenemos los amantes del automóvil. El emplear bloques de motor, asientos de coche o pistones como artículos decorativos es algo que nadie más entendería salvo nosotros. Es por ello que existen productos como las cafeteras que os presentamos. No cafeteras italianas de cocina, auténticas máquinas de espresso de altísima calidad con la forma de bloques de Fórmula 1 de ocho, diez y doce cilindros.

Están fabricadas por Espresso Veloce, un taller de expertos artesanos sudafricanos – sí, yo también pensé que serían de origen italiano – con la idea de ofrecer un homenaje a los brillantes motores de Fórmula 1 de los años 90 y dos mil. Tienen dos gamas de productos, la Serie Titanio y la Serie Carbonio Nero, ambas nada asequibles. Las segundas hacen un uso extensivo de la fibra de carbono en su construcción, y su diseño emplea principalmente tonos oscuros.

Espresso Veloce: la cafetera perfecta para los amantes del automóvil

El diseño de las cafeteras imita a la perfección el aspecto de un motor de competición, y de hecho las piezas son fabricadas con tornos de control numérico de forma similar a los motores de competición. Emplean materiales como el magnesio, el aluminio, el titanio o la fibra de carbono en su construcción artesanal. Cuando ordenamos a la máquina que haga un café, el líquido sale por cada uno de sus tubos de escape de titanio.

Funcionan con cápsulas normales de Nespresso, y admiten las cápsulas de imitación. Las tazas son las clásicas “trompetas” de admisión en una variadísima gama de colores, aunque también se pueden encargar tazas que imitan a la cabeza de un pistón, mucho más “racing”. Para hacernos unos buenos “carajillos” las cafeteras tienen un pequeño depósito para alcohol, inyectado en dosis de 2,5 ml como si de óxido nitroso se tratase.

Espresso Veloce: la cafetera perfecta para los amantes del automóvil

El tamaño de las máquinas es de la mitad del motor que imitan, y sus tolerancias de construcción, además del precio de los materiales, hacen que sean algo más caras que una máquina habitual de Nespresso. Una cafetera V12 cuesta la friolera de 11.000 euros, en una serie Titanio. Todas son ediciones limitadas, con tiradas máximas de 500 unidades.

Fuente: Espresso Veloce
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