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Suzuki Mighty Deck Concept: porque el hombre no sólo vive de las Ford F-150

El vehículo que está en vuestras pantallas es el Suzuki Mighty Deck Concept. Se trata de un kei car en forma de pick-up, un pequeño urbano con espacio extra para cargar todo tipo de bultos. Su nombre no es aleatorio: Mighty Deck es un homenaje al Mighty Boy, un kei car pick-up que Suzuki produjo en la década de los 80. Su gran popularidad ha llevado a los japoneses a relanzar el pequeño vehículo en forma de prototipo. Porque no hace falta pilotar una enorme Ford F-350 para ser el dueño de un pick-up.

La pick-up más simpática del momento

Mide menos de 3,4 metros y tiene 64 CV, pero es más versátil que muchos coches más grandes.

Como buen kei car, es un coche limitado en tamaño y potencia. Ello explica un tamaño de 3,39 metros y un ancho de sólo 1,47 metros. Estos coches son los que menos impuestos pagan en Japón y por ello se asemejan a ladrillos con ruedas: deben aprovechar al máximo el espacio. Como buen kei car, también tiene su cilindrada y potencia limitadas. Es un coche propulsado por un pequeño tricilíndrico de 658 centímetros cúbicos, alimentado por gasolina. Es un híbrido, ya que sus ruedas eléctricas están asistidas por un sistema S-Energy Charge.

Posiblemente hablamos de un sistema semi-híbrido, y en cualquier caso, por su condición de kei car, su potencia máxima no debería exceder los 64 CV. Es un coche biplaza, con una caja recubierta de madera que se adapta a las necesidades de espacio de los ocupantes de manera activa. Su configuración puede cambiar mediante una serie de paneles móviles, además de su altura. Un sistema realmente versátil, con el toque de elegancia añadida que aporta la madera natural de la que está compuesta.

También es posible aumentar el espacio de carga hasta el interior del habitáculo, plegando el asiento del acompañante de forma acorde. Un habitáculo que dicho sea de paso, es descapotable: el techo de lona se abre como si de una lata de sardinas se tratase, en una disposición idéntica a la de coches como el Fiat 500C, sin ir más lejos. Si unimos todo esto con un diseño amigable y al mismo tiempo futurista – fijaos en los preciosos faros – tenemos una combinación ganadora.

Ojalá Suzuki se anime a producir en serie este peculiar vehículo.

Fuente: Carscoops
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