Hace varios días atrás, observando una fotografía del Tyrrell P34 y del Williams FW10, recordé cómo en mi temprana juventud empecé a indagar sobre aquella publicidad que reflejaban tales monoplazas, sobre todo en lo que respecta a ese 1 en los Williams, cuando sus números en el campeonato eran el 5 y el 6. Las respuestas comenzaron a llegar y había un factor común, la presencia de empresas petroleras que, además de asociarse a un provee

Hace una semana estuvimos hablando de la tradición de los pilotos finlandeses del Mundial de Rallyes que cumplían 50 años de edad. Este tipo de tradiciones han aportado al automovilismo esa unión con sus orígenes que ha enriquecido el deporte. También lo ha hecho la posibilidad de ver a pilotos del campeonato intercontinental dejándose ver al volante de vehículos de otras categorías, algo que servía incluso para dar más valor al nivel

El automovilismo nos ha dado para muchos, algunos de los momentos que recordaremos todas nuestras vidas. La primera vez que asistimos a un rally, la última vez que vimos ganar a Porsche las 24 Horas de Le Mans, o a un español reinar en la Fórmula 1 y otro hacer lo propio en el WRC, todas ellas han marcado nuestros recuerdos deportivos. No han sido los únicos. Los descalabros, o muchas rarezas que han puesto sus ruedas sobre el asfalto o la ti

De un tiempo a esta parte, las carreras de clásicos se han hecho un hueco muy importante entre los eventos de automovilismo que se celebran en los distintos circuitos europeos durante el año. Zandvoort, Jarama o el propio Hockenheim reciben cada año algunas de las máquinas/joyas que han marcado una época en sus respectivas disciplinas, y la verdad, es que no ruedan precisamente a velocidad de paseo. Un buen ejemplo de ello es este March B

Ciertamente, con las nuevas reglas las expectativas por observar una propuesta radical estaba en el aire, pero una vez expuestos todos los monoplazas de esta temporada no hay ninguno que deslumbre por ser rompedor o novedoso si se compara con sus antecedentes más recientes. La aleta de tiburón, los apéndices, el ala T sobre la tapa motor no causaron mayor impresión, tal como en su momento provocaron los monoplazas de seis ruedas. En tal senti

Adrian Newey es uno de los diseñadores y en general hombres técnicos más laureados de la Fórmula 1. Puede que no tuviera aportaciones legendarias como Colin Chapman pero desde que entró en Williams en 1991 y hasta nuestros días en otras escuadras, el británico ha ganado todo lo ganable. Pero nadie empieza en la cima y Newey no es una excepción, llegando a la categoría reina por la puerta pequeña y después de pasar por los Estados Unido

Que Jean-Paul Belmondo tuvo un hijo que llegó a competir en la Fórmula 1 es algo que se sabe. Aunque la realidad fuera que el joven Paul Belmondo se inscribió para 27 Grandes Premios y acabó tomando la salida sólo en siete de ellos. Puede que fuera más conocido por su romance con Estefanía de Mónaco a principios de los años ochenta que por su relativamente pobre paso por los monoplazas. De hecho, tan pobre fue ese paso -qué injustos som

La presencia de Alfa Romeo en la Fórmula 1 es algo digno de estudio. Dominador de las temporadas de 1950 y 1951 con un coche que tenía más de diez años y mero comparsa a finales de los años 70 y principios de los 80 a pesar de contar con dinero y personal. Entre las dos épocas, una importante presencia en el mundo de la resistencia y un fallido intento de entrar en la Fórmula 1 como proveedor de motores usando a Andrea de Adamich. Por a

El Tyrrell P34 es el coche de Fórmula 1 con seis ruedas por antonomasia. Cuando uno piensa en el diseño de un coche de carreras con un eje más del habitual, ese es el aspecto que aparece en la mente. Pero Williams, March y Ferrari tuvieron sus propios experimentos en la materia aunque ninguno de ellos llegó a competir por motivos muy distintos cada uno de ellos. Todos ellos motivados por el P34, son los otros coches de seis ruedas. El Marc

Cuando se habla de la Fórmula 1 y la mala suerte, una de las menciones más repetidas es la del neozelandés Chris Amon, quien a pesar de sentirse muy afortunado por sobrevivir en una época increiblemente peligrosa del automovilismo jamás ganó una carrera de la categoría reina... aunque la historia es en realidad distinta, habiendo perpetuado una mentira muy real sobre su falta de victorias. Lo cierto es que Chris Amon jamás ganó un gra