León acaba de poner en marcha el proyecto CityMobil2. No hablamos de esas ideas de SmartCities o experimentos socioculturales, sino de la aplicación al mundo real de la conducción autónoma. Se trata de un proyecto pionero en Europa que busca sentar las bases de un programa que sirva a los sistemas de transporte público para mejorar sus funciones. Ya no hace falta imaginar cómo será el coche autónomo en nuestras calles, tan sólo es necesario montarse en él.
Por el momento hablamos de un programa experimental que tiene ante sí dos grandes objetivos: por un lado enfrentarse a la aceptación del público y de resto de sistemas de transporte, y por otro lado y no menos importante, identificar las exigencias que necesita la conducción autónoma para ser una alternativa real a los sistemas de movilidad tradicionales.
El aspecto más llamativo del programa CityMobil2, no es otro que su enfoque como complemento de los sistemas de transporte terrestres públicos convencionales. En un plano donde las líneas de autobuses y trenes cuentan con paradas y horarios muy definidos, los autobuses autónomos del proyecto CityMobil2 permitirán que los ciudadanos de León puedan llegar a su destino sin necesidad de recurrir a un automóvil, motocicleta, etc.
Lo que plantea el proyecto CityMobil2 es una idea que cada vez gana más adeptos dentro y fuera de Europa. El crecimiento de la población en las ciudades necesita de nuevas soluciones para hacer sostenible el transporte, ya sea forma unipersonal o colectiva. El crecimiento del parque automovilístico está viendo como cada vez se endurecen más las medidas para su uso dentro de los cascos urbanos, lo cual viene acompañado de numerosas iniciativas para regular la contaminación presente en estas zonas.
La introducción de sistemas de transporte sin conductor, es una herramienta más para hacer del transporte público una alternativa cada vez más real al vehículo en propiedad.
Fuente: Leonoticias
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