Esta misma semana se presentaban los nuevos smart fortwo y smart fortwo cabrio, una actualización que por mucho que desde Mercedes-Benz se empeñen en definir como una “nueva generación” no deja de ser un mero lavado de cara, que no obstante era necesario para renovar la figura y la imagen de este pequeño city-car. Pero ahora me hago una pregunta, ¿habrán perdido la oportunidad de preparar un nuevo producto que esté por encima de los competidores que aún están por llegar?
Cuando nacía el Smart en 1998 su principal ventaja eran sus escasos 2.5 metros de longitud y su habilidad de aparcar en batería en habilitadas para aparcamiento en línea. Hoy en día esta habilidad prácticamente la ha perdido, y sus 2.7 metros de longitud no están tan lejos de los casi 3 metros del Toyota iQ. Éste último trató de “subirse al carro” del Smart con una propuesta chic, moderna y urbana y la gran ventaja de disponer de 4 plazas útiles.
Tengo que decir que hoy por hoy, en prácticamente todos los sentidos (excepto el precio, y su tamaño 30 cm mayor), el Toyota iQ vence al smart fortwo. Uno de los aspectos en lo que me pareció muy superior el iQ es en el confort (el cambio de variador continuo es excelente), calidad de acabados y la sensación de estar en un coche de calidad superior, no me extrañó por tanto que Aston Martin lo tomara como base para su pintoresco Cygnet.
Pero también tenemos que mirar al futuro. El smart tendrá que lidiar con una dura competencia en la que los eléctricos se vislumbran como la alternativa ideal para la ciudad. El smart fortwo aún tendrá que esperar a la tercera generación para ver la llegada de los primeros electric drive. Después de probarlo os aseguro que estoy convencido de que en un futuro próximo ni el Smart ni cualquier otro city-car se entenderá sin un motor eléctrico.
Desde Múnich aprietan y ya preparan su BMW Megacity, un vehículo que llegaría a partir de 2013, poco antes de que el Smart se actualice por completo. Tampoco tenemos que olvidarnos de que otras marcas como Renault (aliado del Grupo Daimler) le pondrán las cosas difíciles al Smart a partir de 2011 cuando lancen el Twizy que se construirá en Valladolid (España).
Aún en el tintero de Peugeot y sin que se confirme su llegada a los concesionarios, está el Peugeot BB1, otro prototipo de city-car del que ya dimos cuenta hace unos meses en su presentación en Madrid. Su propio diseñador nos reconoció que aún está lejos de llegar a la calle, pero también pudimos saber que su enfoque chic, elegante y de distinción tendría como objetivo ponerle difíciles las cosas al futuro Smart de tercera generación.
Lógicamente aún era pronto para lanzar el smart fortwo eléctrico, habrá que esperar a que esta tecnología esté lo suficientemente implantada (a nivel de infraestructuras) y los precios se equilibren, para que la silueta del Smart electric drive se convierte en algo habitual en las calles de las grandes ciudades.
En Diariomotor: smart fortwo 62 coupé, a prueba | smart electric drive, toma de contacto
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