ESPACIOS
Cerrar CERRAR
Competición

5 MIN

Breve introducción al mundo de las carreras de resistencia (II)

A raíz del primer artículo de la serie que queremos dedicar en Diariomotor Competición a aquellos que no conozcan tan a fondo el mundo de la resistencia; en Facebook nos pidieron que explicáramos en qué consiste el sistema de categorización de pilotos FIA y cómo afecta éste a qué alineaciones pueden pilotar o no un mismo coche. Así que allá vamos.

Hay que entender, como ya hemos comentado en ocasiones anteriores, que el gentleman driver siempre ha sido una figura clave en las carreras de resistencia. La figura del noble o burgués que compraba un coche a la fábrica y recibía más o menos apoyo de ésta, habitualmente con uno de los pilotos oficiales como compañero, es tan antigua como el propio automovilismo y los promotores del mundo de la resistencia se han molestado en mimarla. Al fin y al cabo son quienes pagan la fiesta.

La FIA establece cuatro categorías de pilotos: Platino, Oro, Plata y Bronce. ¿De qué depende que un piloto caiga en una u otra? Principalmente de su palmarés, pero la edad o la inactividad también influyen. Y hay que tener en cuenta que con el paso de los años la norma ha tendido a relajarse y al final es una comisión de la FIA quien tiene la última palabra. No es raro ver a pilotos con pasado reciente en monoplazas de alto nivel (lo cual teóricamente les convierte en Platino u Oro) solicitar su recalificación.

¿Por qué lo hacen? Las categorías reinas (LMP1 en el Mundial de Resistencia, Prototipos en EEUU, GTE-Pro o GTLM en ambas, Pro en Blancpain GT Series) no suelen tener restricciones: los equipos alinean a quienes quieren, si bien pueden optar por montar a algún piloto con maletín para así cuadrar sus cuentas. Pero para inscribir un LMP2 en Le Mans es obligatorio tener al menos un piloto Plata. Y existen restricciones similares o incluso más severas en GTE-Am (WEC), GTD (IMSA), Silver Cup, Pro-Am o Am en Blancpain GT Series, en numerosos campeonatos regionales o nacionales…

El caso es que para ganar en esas otras categorías debes tener en tu equipo al gentleman driver menos amateur posible. No hay tanta diferencia entre pilotos profesionales como puede existir entre un amateur que sólo se monta en un coche los fines de semana, el que se toma en serio su dieta y su gimnasio o el que corrió en monoplazas pero no obtuvo resultados suficientes. Se da incluso la paradoja de equipos en los que los pilotos Plata cobran, por lo preciados que resultan, mientras que los Platino y Oro deben arrimar el hombro a nivel de presupuesto.

La obsesión de los equipos por buscar un falso amateur llega hasta a sacar de la retirada a algunos sólo porque encajan con su perfil: ocurrió hace pocos años con Aston Martin Racing, que necesitaba uno para su coche en categoría GTE-Am y se dejó los ojos rebuscando la lista FIA hasta dar con Mathias Lauda. Y aunque a ojos del espectador casual resulte imperceptible, las estrategias de carrera muchas veces se plantean en función de cuándo se montará el amateur en el coche rival directo. Para proteger su presencia de forma reglamentaria suele imponerse un tiempo mínimo de pilotaje por carrera.

¿Debe esto preocuparte si sólo sigues la lucha por la victoria absoluta en grandes carreras como Le Mans, Sebring o Daytona? En principio no, pues en LMP1 o Prototipos no es obligatorio montar un amateur aunque sí hay que tener cuidado con los doblados, pues no es lo mismo un mismo coche en función de si es pilotado por un profesional o por el amateur. Pero en carreras raras como las pasadas 24 Horas de Le Mans, en las que un LMP2 lideró durante la mañana del domingo, puede ser clave: Porsche tuvo aún más fácil alcanzar al coche de Jackie Chan DC Racing al encontrarse al volante Thomas Laurent, un joven francés procedente del karting y piloto Plata en el coche #38.

Por ser más directos: si Fernando Alonso corre con Toyota en Le Mans, no te tienes que preocupar de quién es platino o bronce para seguir su carrera. Y en Daytona tampoco deberías, pero United Autosports sí recurrirá al uso de gentlemen drivers en su equipo, probablemente para completar presupuesto. Phillip Hanson será allí el compañero de Alonso y Lando Norris dado que su participación se confirmó antes incluso de que le asignaran tan ilustres colegas. Y aunque él (paradójicamente el único con experiencia en competición al volante de un LMP2) no tendrá tiempo mínimo de conducción, los pilotos de McLaren deberán respetar como cualquier otro participante el tiempo máximo de pilotaje. Cuatro horas de cada seis, lo cual en teoría permite competir por parejas. Algún ejemplo moderno hay: André Lotterer y Charles Zwolsman Jr. lo hicieron en Le Mans 2009 al lesionarse Narain Karthikeyan saltando el muro de la recta de meta antes de la salida.

Foto | Rolex – Influence Sports & Media – Jean-Francois Galeron

Cargando...