Cuando hablamos de un coche blindado se nos viene a la cabeza imágenes de una berlina de representación, como un Mercedes Clase S o un BMW Serie 7, o sus tan extendidos homólogos SUV de gran formato, dígase un BMW X5 o un Range Rover, pero sin duda, lo último en lo que pensaríamos sería un deportivo, y mucho menos, en un Porsche 911.
Porsche 911
El 911 blindado resultó ser un «proyecto fallido»
Hoy os traemos el que quizá es el único Porsche blindado que ha fabricado la compañía de Stuttgart, puesto que su elaboración fue fruto de la idea de ofrecer a sus más distinguidos clientes un deportivo blindado, pero que dado los costes que conllevaría, se quedó en este one-off que hoy os presentamos. Se trata de un 996 prerestyling, lo que lo sitúa entre los años 1997 y 2001, en su versión Carrera, y que actualmente se encuentra en el museo de la firma alemana. Así pues, el 996 no sólo fue el primer nueve-once refrigerado por agua o el primero que dio la espalda a los típicos faros redondos, sino también el primer (y único) nueve-once blindado.
Este 911 pintado en un llamativo color azul turquesa fue tomado directamente de la línea de producción, y la primera modificación que recibió fue unos cristales antibalas de 20 mm de espesor, por lo que tuvo que decir adiós a eso de las ventanillas sin marco como tal, aunque el aislamiento acústico también aumentó considerablemente.
En cuanto a la carrocería, cuenta con refuerzos de Dyneema, una fibra de polietileno altamente resistente y con gran capacidad de absorber la energía, la cual pesa lo mismo que el acero, pero es quince veces más resistente. Con todo ello, el 911 más seguro del mundo es capaz de soportar disparos de una pistola de 9 mm o de un revólver Magnum del calibre 0.44, manteniendo una apariencia, tanto interior como exterior, idéntica a las versiones convencionales, característica indispensable de cualquier vehículo blindado, tal y como ya os contamos en Diariomotor.
Sin embargo, además del precio, este 911 blindado debe pagar un peaje adicional, y es una merma de las prestaciones como consecuencia directa de la masa extra de esas modificaciones, que hace que pase de las 1,3 toneladas hasta las 2,7 toneladas. Así pues, el motor de 3,4 litros bóxer de seis cilindros del Carrera rendía una potencia máxima de 300 CV a 6.800 rpm y un par de 350 Nm, cifras con las que las unidades convencionales sin blindar consiguen unos buenos registros de 5,2 segundos en el 0 a 100 km/h y una velocidad máxima de 280 km/h.
Fuente: That Nine Eleven Guy (YouTube)