Daimler, BMW, Volkswagen, Audi, Porsche y Bosch llevarán a cabo una apuesta conjunta para promover las ventas de vehículos movidos por Diésel en los EE.UU. bajo una agresiva campaña de marketing y el eslogan «Clean Diésel, Clearly Better». Se trata de la primera apuesta serie relacionado con este combustible para su implantación en el mercado norteamericano de vehículos ligeros.
La intención es clara conociendo la experiencia de estas marcas en el continente europeo, la tecnología y la capacidad de fabricación existe, por lo que hablamos de un jugoso pastel a repartirse entre pocos participantes. El mercado de vehículos nuevos en los EE.UU. apenas acoge un 2,6% de propulsores diésel en estos momentos, una cifra diminuta en comparación con el 55% reinante en la Europa más occidental.
EE.UU., todo un mercado por explotar
Las perspectivas que manejan los fabricantes alemanes, que actualmente copan el 100% de las ventas de este tipo, son muy alentadoras en lo que a volumen de negocio se refiere. Las cifras de venta pretenden duplicarse año tras año, mejorando resultados por encima de lo estipulado. Por poner un ejemplo claro de esta tendencia, en los primeros 9 meses de este 2012 se ha conseguido doblar el número de ventas del ejercicio completo correspondiente a 2011.
Los argumentos de ventas para el impulso de este cambio de manguera en los compradores norteamericanos, serán el sustancial ahorro que representará el gasto de gasóleo y el menor impacto ambiental que se le presupone a la tecnología Clean Diésel. Es entonces cuando la polémica queda servida, pues por menor impacto ambiental se vuelve a caer en el tópico de solo mirar las emisiones de CO2 y el menor contenido en azufre y aquí cabe destacar anuncios tan importantes como el emitido por la OMS, donde el humo de escape procedente de un motor diésel ha sido considerado como cancerígeno.
Existen más y mejores alternativas a la implantación del diésel
Obviamente se sobreentiende que la tecnología Clean Diésel ha evolucionado hasta tal punto que el contenido en partículas y diversos componentes comos los NOx prácticamente han quedado reducidos a la nada. Sin embargo existir, existen, y todavía no se alcanza a valorar con exactitud la influencia e impacto del uso masivo de este tipo de combustible en algunos de sus compuestos que son generados tras la combustión. Se especula, se cree, se comenta, pero a día de hoy todavía no existe demasiada información, más si cabe cuando el funcionamiento de los sistemas anticontaminación no trabajan todo lo bien que deberían por según que causas.
En definitiva hablamos de una intención clara y expresa para el cambio de mentalidad de la sociedad norteamericana respecto al uso del gasóleo en sus vehículos. Desde Europa empezamos a mirar con recelo la manguera negra, pues por fin parece que entendemos que existen otras alternativas más allá de la gasolina o el diésel, sobre todo en España. No sería mala idea llevar a cabo una apuesta idéntica fomentando el uso de tecnologías híbridas, sistemas compatibles con GLP o GNC o propulsión eléctrica a baterías o alimentadas por pila de combustible, pero eso sí, habría que pensar que a lo mejor el negocio ya no lo sería tanto.
Fuente: GreenCarCongress
Imagen principal: Flickr de DanDeChiaro
En Tecmovia: La O.M.S. clasifica como cancerígeno el humo de los diésel: análisis y significado práctico | Emisiones, consumos y nuevas leyes: arrojamos un poco de luz a todo este asunto | El consumo ya es el factor nº1 de compra de coches en EE.UU.
