“Tal vez, un día, pruebe el Dakar”. Carlos Sainz Jr. ya ha vivido a pie de etapa lo que es una jornada del Rally-Raid más famoso del planeta, pero tal vez, después de esta experiencia, esté un pasito más cerca de probarlo desde el asiento del piloto en un futuro. El actual piloto de Williams aprovechó la oportunidad de que su padre estaba de pruebas antes del próximo Rally de Marruecos para poder sentarse como copiloto de su padre en la Ford Raptor T1+ con la que actualmente compite el cuatro veces ganador del Rally Dakar.
No se quedó ahí la experiencia, ya que los dos pilotos terminarían intercambiándose puestos, dejando que el reciente autor del podio en el Gran Premio de Azerbaiyán también tuviera su experiencia pilotando uno de los actuales mastodontes de la categoría reina del W2RC. Se recuperaba una imagen que ya es icónica, con Sainz padre ofreciéndole sus consejos a su hijo sobre cómo afrontar cada una de las curvas sobre tierra.
El documento gráfico es excepcional y nos traslada a muchos años atrás, cuando su Sainz hijo miraba embobado como Madrid se volcaba para rendir homenaje a un Carlos Sr. que anunciaba su retirada del WRC. Después de esa vinieron muchas ocasiones especiales en las que el reconocimiento al bicampeón Mundial de Rallyes se dieron por sus hitos deportivos, pero también se entremezclaron con los homenajes a su hijo. Como el del pasado invierno, cuando Ferrari, en su despedida a Sainz Jr. le permitió vivir una jornada de test en Fiorano junto a su padre que ha quedado grabada en la memoria de ambos. Quizás con esta experiencia con Ford se haya devuelto parte de ese momento tan especial.
Está siendo un año en el que hemos visto a numerosos pilotos del Mundial de Fórmula 1 probar algunas de las principales máquinas de las competiciones off-road, con Lance Stroll subiéndose a un Citroën C3 Rally2 a principios de año, siguiéndole Esteban Ocon sobre un Toyota GR Yaris Rally1 y con Takamoto Katsuta al lado, o la experiencia de Liam Lawson también sobre el Ford Puma Rally1. Los rallyes y los raids enganchan.
